SALUD

Donald Trump sufre gran derrota política. Cámara de Representantes retira su propuesta de reforma de Salud

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, recibió este viernes su primera gran derrota política, tras la decisión de la Cámara de Representantes de retirar su propuesta de reformar el sistema sanitario que instauró su antecesor, Barack Obama.

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Una de las promesas de la campaña electoral de Trump se refería a la reforma de la Ley de salud vigente conocida como “Obamacare”.

El pasado jueves Trump lanzó un “ultimátum” a la bancada de legisladores del Partido Republicano. Expresó que aprobaban su reforma sanitaria, la Ley de Seguros de salud, o dejaría vigente la Ley de Protección al paciente y cuidado de salud asequible de la administración Obama.

Sin embargo, la votación de la propuesta de la administración Trump se postergó por 24 horas para intentar lograr los votos suficientes.

Pero este viernes el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, (del gobernante Partido Republicano) retiró el proyecto de Ley de modificación del sistema de salud de Trump.

De este modo, el mandatario se enfrenta a su primer gran derrota política en el Parlamento.

“La hemos retirado”, aseguró Trump, en conversación con el diario The Washington Post.

El mandatario aseguró que los esfuerzos de negociación para lograr los votos suficientes para su aprobación no habían dado resultado.

Según los medios de prensa norteamericanos, Ryan había concurrido horas antes a la Casa Blanca para informar a Trump que no había votos suficientes, al menos 216, para aprobar la nueva legislación.

24 millones de personas hubieran quedado sin seguro médico antes de 2026

Un informe de El Nuevo Herald indica que de haberse aprobado la Ley de Trump, unos 24 millones de personas habrían quedado sin seguro médico antes de 2026, según un reporte de la Oficina de Asuntos Presupuestarios del Congreso, una entidad no partidista.

Asimismo, han resultado beneficiadas “las personas de entre 50 y 64 años, ya que las primas habrían aumentado y los créditos fiscales habrían disminuido”.

Los costos de las primas para alguien de 64 años de edad que gana 26.500 dólares anuales, “se habrían incrementado en 12.900 dólares para un solo año”.

En el informe también se indica que la iniciativa “habría limitado los gastos futuros en Medicaid”, el programa de seguro de salud para los pobres, lo que reduciría sus beneficios.

La propuesta habría “incrementado los impuestos para algunas familias de bajos ingresos, debido a que los nuevos créditos fiscales para obtener seguros de salud eran menores que los establecidos en la Ley de salud de Obama”.

Asimismo, la Ley de Trump habría “eliminado los fondos federales para la organización que provee atención médica a las mujeres”.

En cambio, hubiera sido beneficiados, los ricos, ya que la iniciativa republicana incluía “recortes fiscales por casi un billón de dólares durante la próxima década, y la mayoría de ese dinero habría ido a los muy ricos. Las familias que ganan más de un millón de dólares anuales habrían recibido recortes de impuestos por más de 51.000 dólares en promedio, de acuerdo con un análisis realizado por el Centro de Políticas Fiscales”.

Asimismo, las familias con ingresos anuales superiores a los 200.000 dólares “habrían recibido recortes de impuestos por 5.680 dólares en promedio”.

Además, las personas con ingresos superiores “habrían sido elegibles para recortes fiscales bajo el plan republicano”, se indica en el informe.

De aprobarse la iniciativa de Trump “se habría revocado un impuesto a los dispositivos médicos, que le hubiera ahorrado a la industria más de 20.000 millones de dólares durante la próxima década”.

También se asegura que “se habría derogado un impuesto para los medicamentos de receta, lo que le habría ahorrado a la industria 29.000 millones de dólares en los próximos diez años”.

La nueva ley habría permitido a las aseguradoras “cobrar primas más altas a las personas de mayor edad, que se vuelven más susceptibles a sufrir de problemas de salud”.

Asimismo, hubiera beneficiado a las personas “saludables que no cuentan con seguro de salud por decisión propia, y a las grandes compañías que no brindan prestaciones de salud a sus empleados, ya que se habrían eliminado las sanciones a dichas empresas”, detalla El Nuevo Herald.

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