Cataluña anuncia referéndum de independencia para 2017

El presidente de la Generalitat (Palacio de la Generalidad de Cataluña), Carles Puigdemont anunció este miércoles su intención de convocar un referéndum sobre la independencia de Cataluña, haya o no acuerdo con el Estado, y dijo que se llevará acabo en la segunda quincena de setiembre de 2017. «Necesitaremos el permiso de nuestros verdaderos amos que son los catalanes y catalanas y nadie más. O referéndum o referéndum», subrayó en una reunión mantenida con los diputado de Juntos por el Sí (Junts pel Sí).

Puigdemont aseguró: «Perseguiremos el acuerdo hasta el último día (pero), si llegamos al final de la legislatura y no ha habido respuesta positiva en este sentido, estaremos preparados para (…) convocar el referéndum para la segunda quincena de septiembre del año que viene».

A su vez señaló que ha ofrecido al Gobierno «una nueva oportunidad» para llegar a un acuerdo sobre los términos en los que debe celebrase el referéndum y afirmó: «A finales de junio de 2017 estaremos preparados para podernos desconectar del Estado español en plenas garantías y, si fuera posible, hacerlo de mutuo acuerdo con el Estado español”.

El presidente explicó que la ruta ya anunciada se mantiene intacta. Está previsto que para julio de 2017 estén listas las denominadas Estructuras de Estado para que el vicepresidente Oriol Junqueras y Raül Romeva se encargarán de la organización del referéndum. Y concluyó asegurando que «es la gente la que cambia las normas, la que decide cómo quiere ser gobernada. Necesitamos la validación de la ciudadanía».

Referéndum «laboratorio»

Ya el pasado 12 de septiembre, un día después de la celebración de la Diada, Puigdemont advertía que en 2017 culminaría el proceso soberanista, ya fuese con la convocatoria de un referéndum de autodeterminación o de unas «elecciones constituyentes».

En ese encontes expresó «Si hay un referéndum, tiene que ser vinculante, que tenga los estándares aceptados por el mundo en participación y validación del resultado; debe superar todas las pruebas de estrés para ser reconocido por la comunidad internacional».

Mientras que definió la consulta soberanista del 9 de noviembre de 2014 como un «laboratorio». Aquel día el entonces presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, convocó una consulta participativa sobre el futuro político de Cataluña, ante la imposibilidad de obtener del gobierno central el permiso necesario para celebrar un referéndum de autodeterminación.

En esa consulta participaron más de 2.300.000 personas, casi el 35% de los catalanes llamados a votar, quienes debían responder si deseaban un Estado catalán y, en caso de que así fuera, si querían que este fuera independiente. Un 80,76% votó sí a las dos cuestiones que planteaba la papeleta, Sin embargo, el Tribunal Constitucional español declaró inconstitucional la consulta luego. Tras la celebración de la consulta, Mas reclamó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que permitiese la celebración de un referéndum «definitivo» sobre la independencia de Cataluña.