Más de 20 fallecidos y unas 40 personas heridos es el saldo de un ataque del Estado Islámico a un mercado de Irak

El Estado Islámico reivindicó la autoría de un ataque suicida en una feria de verduras y carnes en la ciudad de Bagdad, Irak. El saldo primario es de al menos 21 personas fallecidas y unos 40 heridos, según informaron fuentes policiales a la agencia de noticias AP.

De acuerdo a información oficial, el ataque fue perpetrado por un camión bomba de al menos tres toneladas que embistió a la feria en la localidad Nahrawan, en Bagdad.

Según The Associated Press, el Estado Islámico dijo en su página web que fue el autor de la matanza que tuvo como blanco a peregrinos chiitas que se dirigían al templo de Kadhimiyah.

Es que entre los fallecidos figuran chiítas en peregrinación mausoleo chií del imán Musa al Kazem, por el aniversario de su muerte.

Por su parte, el general de brigada Saad Mann, portavoz del Ministerio del Interior y del Comando de Operaciones de Bagdad, dijo que el atentado en Bagdad habría sido en respuesta a “los territorios perdidos por Estado Islámico en Irak, donde busca instaurar un califato”, a la vez negó que fuera contra los peregrinos chiítas.

Los chiíes y sus templos son con frecuencia objetivo de los ataques del Estado Islámico.

Crisis política

Además, el ataque coincide con un momento de crisis política, ya que el primer ministro de Irak, Haider al-Abadi, afronta fuertes presiones para que impulse reformas contra la corrupción.

Según informó AP, docenas de manifestantes “treparon las murallas” que rodean la denominada “Zona Verde”, que alberga la mayor parte de los ministerios y embajadas, e ingresaron al Parlamento para protestar.

En tal sentido, las fuerzas de seguridad lanzaron gas lacrimógeno contra los manifestantes.