Dos jefes de las FARC uno de ellos negociador de paz, mueren en bombardeo del Ejército

La delegación guerrillera en la mesa de negociaciones para la paz, en La Habana, confirmó que dos jefes de las FARC, uno de ellos integrante de la misión que viene actuando en Cuba, fueron muertos en un ataque del ejército de Colombia. Las FARC pidieron la intervención de la Cruz Roja en tanto afirman que a guerrilleros capturados con vida después del ataque, “les dieron el tiro de gracia”.

El cubano Rodolfo Benitez (izq) y el noruego Dag Nylander (der) parte del equipo que continúa con las negociaciones, aún en medio de los últimos acontecimientos. Foto: Adalberto Roque – AFP.

“Informamos al país y al mundo que el compañero “Jairo” Martínez, integrante de la delegación de las FARC en esta ciudad, quien estaba en misión de pedagogía de paz en dicho el frente en Cauca, se encuentra entre los guerrilleros asesinados”, dijo el comandante Pastor Alape, jefe de la delegación guerrillera negociadora en Cuba. El delegado caído, Pedro Nel Daza Martínez de 63 años, había retornado a Colombia para explicar a los guerrilleros combatientes, en sus reductos, el alcance de las negociaciones y las formas para acabar con el conflicto armado.

Alape confirmó que en otro ataque, el pasado fin de semana, murió el comandante Román Ruiz, miembro del Estado Mayor Central de las FARC.

Hasta el momento sin embargo ni la parte guerrillera, ni la del Gobierno han manifestado ningún tipo de advertencia sobre la posibilidad de abandonar la mesa de negociación, aunque tampoco dijeron nada sobre otro posible alto el fuego en lo inmediato. No obstante Alape reconoció como urgente la necesidad de “concretar las medidas de desescalamiento del conflicto que estábamos analizando, ya que es la única manera de frenar las hostilidades.”

Piden intervención de Cruz Roja por rematar herido

Los guerrilleros pidieron además que los cadáveres de sus compañeros muertos en el enfrentamiento de estos días, “sean inspeccionados por forenses nacionales e internacionales, bajo la mirada neutral del Comité Internacional de la Cruz Roja”, dijo Alape. Las versiones de las FARC afirman que los heridos del lado insurgente no fueron ayudados por las tropas del Estado, sino rematados con un tiro de gracia, lo que es una flagrante violación al derecho internacional humanitario en áreas de guerra.

Alape desestimó que los ataques crecientes desde Bogotá puedan estar logrando algún tipo de victoria para el Gobierno, y recordó que fue durante la suspensión de los bombardeos que se alcanzó el menor número de bajas durante un período concreto.

Mientras tanto en Bogotá el coordinador de la Fundación Paz y Reconciliación de Colombia, Ariel Avila, reconoció que en estos momentos “el riesgo para el proceso de paz es muy alto: que caiga un comandante o que las FARC hagan un gran atentado en la ciudades y que el gobierno reaccione”, dijo en referencia a lo que se vive tras el cese del alto el fuego.

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