Viena mantendrá semáforos “gays”, los primeros en el mundo que ya operan en sus cruces céntricos
Viena se había convertido en la primera ciudad del mundo en disponer de semáforos “gays” en el marco de distintos actos vinculados a la tolerancia, en el marco del festival de Eurovisión y el baile Life Ball, para recaudar fondos destinados a la investigación por el Sida. Las luces de los semáforos, en vez de mostrar el tradicional hombre solo, representan a dos muñequitos del mismo sexo, de la mano o abrazados, y en lo demás operan como cualquier semáforo convencional.
Fueron dispuestos en principio hasta junio próximo en el marco de los encuentros internacionales antedichos, pero su éxito ha sido tal –aunque también tuvieron sus opositores- que ahora la municipalidad ha decidido mantenerlos como fueron diseñados para que continúen operaciones normales de regulación del tránsito. Los semáforos “gay-friendly” están instalados en 47 intersecciones de la capital austriaca.
“Adquirieron legitimidad y por eso se quedan”
La concejal de Viena a cargo del área del Tránsito, Maria Vassilakou, dijo que los nuevos semáforos “adquirieron legitimidad y por eso se quedan”, en declaraciones a la radio estatal ORF. La representante vienesa, agradeció a los vecinos de la capital, por haber recibido más de 20.000 “Me Gusta” en Facebook para su consulta sobre si mantener o retirar los semáforos, con una marcada tendencia hacia la aprobación.
La oposición en tanto –el Partido de la Libertad, derechista- anunció que presentará una demanda penal contra Vassilakou por contravenir las regulaciones del tránsito. La acusan además de “despilfarrar” los fondos públicos que tanto trabajo dan a los contribuyentes. Aseguran que cada semáforo ha costado unos 63 mil euros (US$70.000).
Finalmente en Alemania, el concejo municipal de Munich anunció que instalará 50 semáforos de similares características que los vieneses, confirmó la agencia de noticias germana DPA. “Es que se trata realmente de una señal importante contra la homofobia. Vamos a fomentar estas cosas”, afirmó el concejal Christian Vorlaender, en Munich.
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