Francia resucita política de derecha de la mano de Sarkozy, condena al socialismo y hunde a la ultraderecha
Las elecciones departamentales de Francia, que para muchos constituyen el mejor termómetro del espíritu nacional y su satisfacción o rechazo al gobierno nacional, marcaron un resurgimiento de la derecha comandada por Nicolás Sarkozy, el rechazo a las políticas de Hollande, y un aún más enfático repudio a la ultraderecha de Le Pen.
Los medios franceses coinciden en la mañana del lunes que Francois Hollande es sin embargo el más perjudicado con el resultado ya que el socialismo corre peligro de perder en primera vuelta las próximas elecciones presidenciales, si Sarkozy y Le Pen, unen sus caudales electorales.
El socialismo perdió la mitad de los 61 departamentos, (hay un total de 101 en toda Francia) que tenía con votos propios o con sus aliados, y experimenta así su cuarta derrota en lo que va del año, tras perder en las municipales, las europeas y las senatoriales del año pasado. El propio departamento de Hollande y su bastión principal –Corrèze- cayó también entre los 28 que perdió a manos de la oposición.
Un victorioso Sarkozy, se mostró exultante y dijo que “la alternancia en el poder está en marcha: ya nada la detendrá”, algo que el ex presidente alienta desde que Hollande lo derrotara en 2012. “Los franceses rechazaron masivamente la política de François Hollande y de su gobierno. Jamás una política había encarnado semejante fracaso”, dijo Sarkozy, que no obstante debe pasar todavía una fuerte prueba: debe derrotar al ex primer ministro Alain Juppé, en las internas de su partido este año, para lograr ser el candidato de la Unión por un Movimiento Popular (UMP).
Aunque la ultraderecha no gana ningún departamento, triunfa
En lo que para muchos es el anteúltimo testeo de la opinión francesa antes de las elecciones nacionales de 2017 –la última serán las regionales este año- la controversia sobre la derecha y su futuro está desatada. Es que si bien los ultraderechistas de Le Pen no han logrado ni un solo departamento, aumentaron sus votantes que ahora conforman el 25,1% del total en primera vuelta: tenían 1 solo edil y ahora lograron entre 65 y 68 departamentos. La izquierda en total tendrá de 32 a 35, invirtiendo la relación de fuerzas donde la derecha controlaba 41 departamentos y la izquierda, 61.
En la mañana del lunes, grupos de socialistas “desconformes” llenan las radios, asegurando que si no hay una reacción y viraje a la izquierda urgente por parte de Hollande, las elecciones del domingo habrá sido un “ensayo general” de lo que ocurrirñá en 2017.
Los diarios son también críticos y mientras “Le Parisien” afirma que ha sido “la más fuerte bofetada recibida por la izquierda en comicios departamentales desde 1992”; para el matutino Liberatión, de la más fuerte raigambre izquierdista, señala que si el gobierno “no se reconcilia con el electorado (con) una victoria, aunque sea parcial, frente al desempleo, la izquierda será inevitablemente expulsada del poder”
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