PACIFICACIÓN

Gobierno de Colombia suspende bombardeos a campamentos de las FARC y expande la tregua

La decisión del gobierno colombiano de suspender “durante un mes” los bombardeos a los campamentos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) ha sido considerado un gran paso adelante a efectos de las conversaciones de paz que ambos bandos mantienen en La Habana.

Humberto de la Calle (izq), líder negociador por parte del Gobierno de Colombia, y el General Javier Florez (der), representante de las FARC-EP. / Foto: Yamil Lage - AFP
Humberto de la Calle (izq), líder negociador por parte del Gobierno de Colombia, y el General Javier Florez (der), representante de las FARC-EP. / Foto: Yamil Lage – AFP

El jefe de la delegación del gobierno colombiano, en las negociaciones con la guerrilla en Cuba dijo que se ha fijado un mes de tregua para los ataques aéreos, como “un margen adecuado de tiempo para poder tomar una decisión, para examinar en el terreno qué ha ocurrido”. Humberto de la Calle, negociador principal del gobierno de Juan Manuel Santos, dijo que ello en absoluto representa un repliegue de las fuerzas oficiales.“No habrá repliegue de la Fuerza Pública, no van a dejar de actuar, no hay parálisis y tampoco es un cese bilateral disfrazado”, dijo el ex vicepresidente del país.

Agregó que la intención del presidente Santos, es avanzar en “el desescalamiento” del conflicto, y adelantó que se darán nuevas señales en ese sentido en la segunda fase de conversaciones en La Habana. “Este no es el fin de la historia, regresaremos a La Habana para buscar más por la vía de acuerdos o por la vía de decisiones unilaterales”, puntualizó.

Discrepancias en la interna colombiana ante la medida

El anuncio del negociador, no solamente aclara aspectos de la decisión, sino que la ratifica en la interna colombiana, donde la Procuraduría de la Nación, había hecho observaciones a la medida adoptada por el presidente Santos, al ordenar a la Fuerza Aérea, la suspensión de los ataques.

Para la Procuraduría, existe una “paralización de la fuerza pública” mientras que las FARC no asumen compromiso alguno “y siguen delinquiendo”, lo que ha calificado como “golpe moral” para los militares.

La Procuraduría agregó que la medida beneficia a otros grupos guerrilleros como el Ejército de Liberación nacional (ELN) y a las Bacrim, que siguen operando y que en algunas zonas lo hacen en conjunción con las FARC, aún cuando éstas aseguraron que cumplirían el alto el fuego. No obstante desde las FARC se ha puntualizado que ello no es correcto y que la tregua se cumple, sin nuevos secuestros ni minado de nuevas áreas.

El presidente Santos, dijo en referencia al tema que ahora las fuerzas militares aumentarán su presión sobre el ELN, para que acuerden también con el Gobierno una fórmula de pacificación general. 

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