Rusia amenaza con dejar sin gas a Ucrania si no paga en dos días

Mientras tanto, la compañía estatal de gas de Ucrania, Naftogaz, acusa a Rusia de no enviar el suministro que Kiev había pagado por adelantado, cuando previamente Moscú dijo haber enviado una parte a las regiones ucranianas dominadas por los rebeldes.

Tras cortar el abastecimiento a Ucrania durante seis meses, Rusia reanudó los envíos a finales de 2014 después de que ambas partes firmaran un acuerdo en Bruselas por el que Kiev pagaría parte de la deuda y sufragaría por adelantado los suministros para el invierno.

Serios perjuicios para Europa

Ucrania no ha depositado en el plazo reglamentado el pago anticipado y ello puede conducir a una suspensión de los suministros dentro de dos días, explicó a la prensa, el presidente de la junta de directores de Gazprom, Alexéi Miller.

Según Miller, la solicitud de Naftogaz para la entrega de 114 millones de metros cúbicos diarios de carburante peligra si no se efectúan las debidas transferencias a la cuenta de Gazprom, y en consecuencia, creará serias amenazas para el tránsito de combustible a Europa.

La compañía ucraniana reclamó a su vez, la víspera, al proveedor ruso que del volumen total solicitado el 22 de febrero (114 millones), Gazrpom bombeó solo 47 millones.

En el reporte emitido por el consorcio ruso se afirma que Ucrania depositó un anticipo por cerca de 715 millones de metros cúbicos para febrero.

La prensa rusa llama la atención de que esta nueva controversia por el gas tiene como telón de fondo los suministros realizados por Gazprom la semana anterior a las regiones de Donetsk y Lugansk por estaciones de bombeo alternativas, pero los contempló como parte del contrato a largo plazo con Naftogaz, vigente desde 2009.

Contrariamente a lo que supone Gazprom, la contraparte ucraniana incrementó en el pedido los volúmenes de asignación diaria en 1,5 veces (respecto a lo pactado), con el propósito de absorber el mayor volumen de gas posible por las tuberías en territorio de ese país.

En opinión de analistas citados por la agencia Ria Novosti, con esa maniobra se obligaría al proveedor a suministrar carburante al sureste ucraniano fuera del contrato con Naftogaz, que quedaría así excluida del pago por esas partidas.