EN EL VATICANO

Papa Francisco: cometen “gravísimo pecado” los patronos que pagan mal o en negro a sus empleados

El papa Francisco volvió a concitar la atención de la cristiandad al apuntar sobre temas de la cotidianidad en el trabajo, ahora en defensa de los trabajadores cuyos patronos les pagan de forma irregular, o “en negro”, sin aportar lo que debieran.

«No es buen cristiano aquel que no hace justicia con las personas que dependen de él”, puntualizó./ Foto AFP

Durante una reunión en El Vaticano con los obispos de Ucrania, el pontífice dijo que quienes van a misa todos los domingos, comulgan, dan limosnas y hasta envían “cheques para ayudar a la Iglesia”, pero después les pagan irregularmente a sus trabajadores, cometen un “pecado gravísimo”.

Durante la homilía en la residencia de Santa Marta, Francisco dijo que pagar “en negro”, sin hacer los partes para que el trabajador tenga derechos de salud y jubilación, y después dar limosnas es intentar usar “a Dios para cubrir la injusticia: y eso es un pecado gravísimo”.

El papa hizo particular hincapié en las próximas Pascuas, y dijo que la liturgia no está basada en “no comer carne los viernes, hacer cualquier cosita, y después hacer crecer el egoísmo, la explotación del prójimo, ignorar a los pobres: no es buen cristiano aquel que no hace justicia con las personas que dependen de él”, puntualizó.

Apuntando a los corruptos que intentan sobornar al Supremo

“El corrupto lleva una doble vida. Mete la mano en el bolsillo y da a la Iglesia. Pero con la otra mano, roba: al Estado, a los pobres… Roba”, había dicho anteriormente el papa que no ceja en su empeño de recordar que “los corruptos escandalizan porque no se arrepienten”. Incluso ha enfatizado con la visión bíblica del hombre por la cual “se merecen – lo dice Jesús, no lo digo yo – que les pongan en el cuello una muela de molino y sean arrojados al mar. No se habla de perdón aquí”.

También en esta oportunidad Francisco refirió a otras injusticias sociales, que lentamente parecen enquistarse de tal modo que terminan convirtiéndose en habituales y hasta aceptadas, pero no por eso dejan de ser menos pecaminosas. “¿Qué puedo hacer por los niños o por los ancianos que no tienen la posibilidad de ser visitados por un médico, o que esperan ocho horas y más el turno para ser atendidos y luego les cambian la cita para la semana siguiente?”, dijo Francisco, ante los fieles trayendo a tierra un fenómeno que ocurre tanto en el subdesarrollo africano, como en la más tecnológicamente avanzada atención médica de Europa y Norteamérica.

Francisco recibió a los obispos ucranianos, ante los que expresó su dolor por las consecuencias de la guerra y alentó a la unidad en estos momentos “por todos aquellos que son golpeados por la violencia, con la súplica al Señor para que conceda rápido la paz, y con la petición a todas las partes interesadas para que sean aplicadas las resoluciones de común acuerdo y sea respetado el principio de la legalidad internacional”.

El papa convocó a “que sea observada la tregua recientemente suscrita y sean aplicados todos los demás compromisos que son condiciones necesarias para impedir la reanudación de las hostilidades”. Añadió que más allá del tema político hay tragedias que se arrastran y exigen solución. “Cuestiones que en parte tienen una base política, a las cuales no son llamados a dar una respuesta directa, pero también hay tragedias socio-culturales y dramas humanos que esperan su contribución directa y positiva”, dijo a los obispos.

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