Españoles venden pintura de Goya falsa a un jeque y cobran 4 millones de euros… falsos

La historia que bien merecería un guión de película entre cómica y policial, comenzó en 2003, cuando dos hermanos de Gerona, en la frontera hispano-francesa, compraron un cuadro de Goya, auténtico según les aseguraban: “Retrato de Antonio María Esquivel”.

La obra les costó 300.000 euros de los que pagaron 20.000 euros a modo de seña. Sin embargo a poco de llevar la obra a un experto en arte, se descubrió que el cuadro era falso, sin duda alguna. Los hermanos geroneses reclamaron al vendedor, sin mayor fortuna, mientras que la Audiencia General de Gerona, al intervenir eximió a los estafados de pagar el resto del dinero que debían por el cuadro.

Sin embargo los hermanos no se quedaron desconsolados por el asunto, sino que buscaron una nueva víctima, y localizaron a un supuesto jeque árabe, según informa la Policía Nacional y publica el diario ABC de España.

Una maraña de intermediarios complica el asunto

Los hermanos, a través de un intermediario del jeque, acordaron cobrar por la obra cuatro millones de euros. Había que viajar a Turín, donde el intermediario les entregaría una seña algo superior al millón y medio de francos suizos por la obra; pero en ese mismo acto debía pagar la comisión del intermediario: 300.000 euros.

Pero como no tenían el dinero, lo consiguieron prestado de un empresario geronés, que pagó el dinero a un intermediario español en Gerona, para el intermediario del jeque en Italia, a cambio de los francos suizos. Los 300.000 fueron entregados y el millón y medio de francos suizos también.

Pero cuanto intentaron depositarlos en un banco suizo, descubrieron que en realidad, eran fotocopias y no papel moneda legal.
El enredo alcanzó tal magnitud, y trascendencia, que intervino el Grupo de Patrimonio Histórico de la Policía española, que incautó el falso cuadro y detuvo a los hermanos gironeses. Los 300.000 euros reales, los intermediarios y el jeque, todos han desaparecido.