EN MALASIA

Oposición ganaría las elecciones, pero su líder es condenado por sodomita “con antecedentes”

El Tribunal Federal de Malasia, condenó por sodomía al líder de la oposición al Gobierno –Anwar Ibrahim- denunciado por uno de sus asistentes, lo que impedirá se presente a las elecciones previstas para 2018, lo que amenaza ya la estabilidad política del país.

Anwar Ibrahim, candidato opositor que cuenta con grandes posibilidades de ganar las elecciones en Malasia / Foto: Heikal Rosli - AFP
Anwar Ibrahim, candidato opositor que cuenta con grandes posibilidades de ganar las elecciones en Malasia / Foto: Heikal Rosli – AFP

Ibrahim afirma que se trata de una maniobra de las autoridades del partido de Gobierno –el Barisan- que ostenta el poder en Malasia desde que el país se hizo independiente en 1957. “Es una clara estrategia del Gobierno: legalmente no tienen pruebas, no hay para un caso. Pero sigo siendo el enemigo público número uno, porque tienen miedo de perder el poder más de medio siglo después”, declaró Ibrahim. El acusado concurrió a los Tribunales, acompañado por su mujer y sus hijos. Las autoridades temían que la sentencia produjera incidentes en el centro de la capital, donde el partido opositor tiene mayores preferencias. El Partido de la Justicia Popular, escindido del partido de Gobierno, ha sido liderado por Ibrahim desde que abandonó los puestos que ostentaba en la Administración oficial, donde fue ministro de Cultura y más tarde de Finanzas, entre los años 1980 y 1990.

Antecedentes muy complejos en un país musulmán

Ibrahim sin embargo no es ajeno a estos cargos. Cuando era ministro del gobierno hace 20 años, terminó siendo acusado de homosexual por el primer ministro de la época A. Mahathir, que había sido quien lo impulsó al gabinete ministerial.

Las leyes prohíben estrictamente la homosexualidad en el país, dada su condición de nación musulmana, pero hay un consentimiento tácito que lo ha llevado a convertirse en uno de los islámicos “tolerantes” en la materia.

Ibrahim estuvo encarcelado por cargos similares entre 1998 y 2004, pero finalmente la sentencia se anuló y fue liberado. En 2008 uno de sus ayudantes denunció haber sido violado, pero el juez ante la falta de pruebas lo eximió en 2012. El Tribunal de Apelaciones volvió a revocar la sentencia en marzo del 2014, por un recurso desde el Gobierno, y le condenó a cinco años de prisión. Ibrahim apeló al Tribunal Federal, que ahora rechazó su reclamo.

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