La Cuarta Sala Penal Liquidadora de la Corte Superior de Lima, lo condenó ahora a ocho años de cárcel con tres de inhabilitación, además de una multa por “incumplimiento de sus funciones” a lo que se suma que “participó” de desvíos de fondos estatales. Los fondos fueron empleados para pagar titulares de prensa y páginas enteras en algunos medios a favor del gobierno “fujimorista”, principalmente en los medios sensacionalistas peruanos, que estuvieron casi todos en apoyo del régimen.

Se trataba del último juicio que tenía todavía pendiente Fujimori, para laudar con la justicia de su país.

El involucramiento de la prensa con la presidencia del momento

“Está probado que Fujimori ordenó al comandante general del Ejército peruano José Villanuevaentre los años 1999 y 2000; al ministro del Interior César Saucedo, en el mismo período; al ministro de Defensa Carlos Alberto Bergamino, de manera directa y personal, que siguiera las disposiciones dictadas de Vladimiro Montesinos para el desvío de dinero de sus respectivos presupuestos al SIN”, dice la sentencia judicial.

Fujimori ha sido condenado a la pena máxima que prevé el código para esta ilegalidad, en tanto para el juez había una relación “funcional directa” entre las partidas usadas y sus órdenes. “Está probado que Fujimori cometió el delito de corrupción (…)  Se aprovechó de su estatus que le confería su cargo, por tanto el reproche es mayor debido a que se apropió de fondos públicos”. Las apropiaciones fueron “en un contexto de recesión, devenidos del fenómeno de El Niño y de la recesión mundial”, concluye el juicio.