Investigadores estudian posible participación de Ejército en desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa

El destino que corrieron los estudiantes de Ayotzinapa sigue siendo incierto. De los 43 normalistas sólo se logró identificar los restos de uno de ellos, el estudiante Alexander Mora.

En las últimas horas el periódico la Jornada informó, según dio cuenta Prensa Latina, que Jorge Antonio Montemayor, del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y Pablo Ugalde, de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), son los encargados del estudio en los crematorios del Ejército y privados, donde “probablemente” habrían sido llevados los estudiantes desaparecidos.

Ambos investigadores habían refutado en diciembre pasado la versión de la Procuraduría General de la República (PGR), la cual afirmó que los 43 normalistas fueron incinerados en un basurero del municipio de Cocula, estado de Guerrero.

En aquel entonces indicaron que dicha versión “carecía de base científica y de sustento en hechos y/o fenómenos físicos o químicos naturales, pues, por ejemplo, si los 43 cadáveres se hubiesen quemado con pura leña, se hubiesen necesitado un promedio de 33 toneladas de troncos de árboles de unas cuatro pulgadas de diámetro”.

También expresaron que de haberse efectuado la quema de cuerpos con neumáticos, “además de necesitarse una cantidad cercana al millar, tal quemazón hubiese dejado una inmensa columna de humo que difícilmente pasaría inadvertida, pues se podría haber visto desde 10 kilómetros de distancia”.

Indagatoria hacia el Ejército

Asimismo indicaron que la línea indagatoria que apunta hacia el Ejército “es bastante probable porque los estudiantes pueden haber sido incinerados en crematorios modernos del Ejército o de empresas privadas, con instalaciones suficientemente grandes y con morgue”, expresó el doctor Montemayor en entrevista con La Jornada.