Desciende la cantidad de penas de muerte en los Estados Unidos
El número de ejecuciones realizadas en Estados Unidos registró un descenso al igual que las condenas a muerte. No obstante, existen casos de “ejecuciones fallidas” que obligaron a los presos a “luchar por su vida durante un período prolongado de tiempo”.
Los datos surgen de un estudio del Centro de Información sobre la Pena de Muerte de EE.UU.
De acuerdo al documento a pesar de que el número de prisioneros ejecutados en 2014 es el más bajo de los últimos 20 años, siguen existiendo “ejecuciones fallidas” que resultan crueles e inhumanas.
El centro de información indica que el 80% de las 35 ejecuciones que se han realizado este año se han concentrado en los estados de Texas (10), Misuri (10) y Florida (8).
Procedimientos fallidos
El informe revela que los experimentos con inyecciones letales practicados en los Estados Unidos se continuaron realizando a lo largo de este año y que las cuatro primeras ejecuciones de 2014 fueron llevadas a cabo con diferentes combinaciones de drogas letales.
“Al menos tres de estas ejecuciones fueron realizadas de forma incorrecta”, apunta el documento, y detalla que hubo condenados que se quedaron “sin aire” o tuvieron que luchar por vivir “durante un periodo de tiempo prolongado”.
Un ejemplo de ello fue la ejecución de Clayton Lockett en el estado de Okhlahoma, en la que el preso estuvo agonizando durante 13 minutos después de haber recibido la inyección letal y varios médicos ordenaron sin éxito la detención del procedimiento.
Además, la organización, que relaciona la disminución del número de ejecuciones con el descenso de crímenes susceptibles de ser castigados con la pena de muerte, recuerda que para el año 2015 ya hay 30 ejecuciones planificadas.
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