AUSTRALIA

Atentado en café de Sídney culmina con la muerte de dos rehenes y el secuestrador

Tras el atentado que protagonizó en un café de Sidney Man Haron Monis, autoproclamado clérigo musulmán de origen iraní, la Policía de Australia confirmó la muerte de tres personas, dos rehenes y el secuestrador, y cuatro heridos.

Los heridos son tres mujeres, una de ellas con herida de bala, y un agente policial.

La toma de rehenes en un café del centro de Sídney estuvo a cargo de Man Haron Monis, quien actuó en solitario, un religioso nacido en Irán, que “tenía un largo historial de delitos violentos, extremismo e inestabilidad mental”, dijo el primer ministro australiano, Tony Abbott,

Según informó EFE,  la operación para liberar a los rehenes culminó con la muerte de una mujer de 38 años y un hombre de 34, y del  secuestrador, Man Haron Monis quien ya había protagonizado numerosas protestas en Australia contra la intervención militar en Afganistán.

En tanto que los heridos son tres mujeres, una de ellas con herida de bala, y un agente policial.

La agencia de noticias EFE relató que Man Haron Monis, conocido como jeque Haron, ingresó en solitario el lunes por la mañana en el local Lindt Chocolate Cafe, de la zona financiera Martin Place, y secuestró a las personas que había en su interior, personal y clientes, durante 17 horas.

Obligó a dos personas a que sujetasen una bandera en el vidrio de la entrada con un mensaje escrito en árabe que decía: “No hay otro Dios que Alá y Mahoma es su profeta”, la declaración de fe musulmana.

Los cuerpos de seguridad de la policía australiana intervinieron después de cerca de 17 horas de secuestro.

Motivaciones políticas

El primer ministro australiano, Tony Abbott, dijo que el secuestro se trató de un acto con “motivaciones políticas”.

Australia ha tenido una fuerte posición en contra del terrorismo islámico y ha estado vinculada con Estados Unidos ya desde la primera Guerra del Golfo (1990 y 1991) cuando fue uno de los primeros países en unirse a la fuerza de la coalición.

Asimismo, luego de los ataques terroristas contra las Torres Gemelas del 11 de Septiembre de 2001, Australia se unió con Estados Unidos y Gran Bretaña contra Afganistán con el objetivo de combatir al “eje del mal” encabezado por la organización Al Qaeda.

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