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El rapero Tiny Doo, enfrenta cadena perpetua por su música que “causó crímenes”

Brandon Duncan, un rapero estadounidense conocido artísticamente como “Tiny Doo” enfrenta un juicio que puede condenarlo a cadena perpetua, por sus temas con los que “causó crímenes violentos”, según la Fiscalía.

Brandon Duncan, el rapero estadounidense conocido artísticamente como “Tiny Doo”.

El disco “No Safety” (Sin salvación) es el epicentro del debate por haber provocado una ola de violencia el año pasado en California, a lo que se suman nueve incidentes en los que Tiny Doo se vio involucrado, todos los que terminaron en tiroteos o cuando menos intercambio de fuego con armas prohibidas. Tiny Doo, aunque carece de antecedentes penales, es acusado de ser uno de los pandilleros más activos en San Diego, y está acusado junto a otros miembros de su pandilla por “intento de homicidio”.

La cadena perpetua, pesa sobre el artista, al aplicarse una ley de reciente data (del año 2.000) según la cual los pandilleros pueden ser enjuiciados por los delitos que cometieron otros miembros de la pandilla, cuando los crímenes los beneficiaren de uno u otro modo.

El beneficio existió: los discos se vendieron mucho más tras cada tiroteo

Si bien Duncan podría aparentemente desentenderse de las acusaciones de intento de homicidio, las más graves que tiene, la nueva ley lo involucraría en tanto “se benefició” con los intentos de asesinato que cometió su pandilla, delitos que incluso estimuló directamente a través de su música.

Según la fiscalía algunos temas estimularon a los pandilleros a exacerbar su actuación criminal, (algo difícil de probar), pero también aumentaron las ventas de los discos que se multiplicaba cada vez que los delincuentes se tiroteaban con otros, lo que redundaba en beneficios económicos para el rapero (algo bastante más fácil de probar). Para el Ministerio Público, el rendimiento comercial del álbum está directamente vinculado al mensaje violento de las letras y al estatus que adquirió la pandilla del cantante en función de los crímenes cometidos a partir de esa persuasión.

Los abogados de Duncan han preferido de momento no expedirse hasta tanto tengan toda la acusación de la fiscalía formalizada, pero adelantan que la ley que se quiere aplicar no corresponde, en tanto atenta contra los principios constitucionales que defienden la libertad de expresión.

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