Estado de Nueva York: cuatro muertos y “estado de emergencia” en máxima ola de frío

La zona más afectada es la ciudad de Búfalo –la segunda en importancia del Estado de Nueva York- donde una gran tormenta de nieve se abatió sin suficientes advertencias previas de los meteorólogos, lo que atrapó desprevenidos a miles de ciudadanos que debieron extremar medidas para no morir congelados.

Las temperaturas se derrumbaron en medio de la tormenta, tras cuyo primer embate se emitió un comunicado de alerta total hasta el viernes próximo en principio. El gobernador neoyorquino, Andrew Cuomo ha decretado el estado de emergencia y desplegó la Guardia Nacional, para que evite una catástrofe de magnitud, en toda la zona afectada. Las previsiones indican que la tormenta se desplaza hacia el centro del país, pero se asegura que perderá fuerza para el fin de semana.

Temperaturas bajo cero propias de enero, no de noviembre

Para los meteorólogos la ola de frío se presentó de manera sumamente inesperada y anticipada a la época y responsabilizaron a un “efecto lago” lo que está ocurriendo. La denominación corresponde al momento en que el vapor de agua de los Grandes Lagos, se congela como si fuera nieve y se extiende como si se tratara de una tormenta, algo que tiene la particularidad de focalizar de manera extrema los puntos donde se advierte nieve en gran cantidad, muy cerca de otros donde no hay casi rastros de ella.

El fenómeno que tuvo a Búfalo como epicentro ha tenido también consecuencias de peso en New Hampshire, Michigan, Carolina del Norte e Indiana.

Búfalo ostenta un récord en 2001, de 2,1 metros de nieve caídos en cinco días, pero la tormenta que ya pasó del metro y medio en menos de dos días, podría superar aquella marca. El alcalde de Búfalo, Byron Brown calificó la situación de “muy grave” y dijo que la tormenta es “probablemente la más fuertes que hemos visto en los últimos cuarenta años”.