Apaleamiento policial de manifestante deviene viral y recrudecen las protestas

La televisión local, había captado el momento en que los policías se ensañan con un hombre, que luego fue identificado como Ken Tsang, del Civic Party, el principal partido prodemocrático en Hong Kong, y que se desempeña como trabajador social ayudando a niños en situación de calle.

Los policías arrastraron al hombre hasta detrás de un edificio gubernamental, donde lo golpearon en el suelo. El manifestante debió ser hospitalizado, y el video se hizo viral en las redes sociales, lo que abrió el paso a un repudio generalizado. Las autoridades aseguraron que el caso será investigado y que los policías autores de la golpiza, están de momento separados de sus funciones.

Las manifestaciones recrudecen y se extienden a China continental

Después de conocerse el apaleamiento, miles de manifestantes volvieron a las calles, reforzando las líneas de los que están ocupando distintas áreas, y comenzaron a avanzar contra edificios del Gobierno, lo que fue rechazado por fuerzas de choque. En los más duros enfrentamientos en lo que va de la semana, cientos de policías usaron gases lacrimógenos y pimienta, para disolver a los manifestantes, pero estos se reagruparon en algunos de los túneles de autopista y cortaron el tránsito.

Horas después cientos de personas manifestaban ante la comisaría del distrito de Wan Chai, de donde son los policías que golpearon al manifestante.

Mientras tanto la ONG, Chinese Human Rights Defenders, dijo que más de medio centenar de personas fueron detenidas cuando intentaban manifestar en Pekín, en apoyo a las reivindicaciones pro democráticas en Hong Kong. La prensa local no ha hecho referencia al suceso, pero la cadena de televisión británica BBC, afirmaba en la mañana del jueves, que China había bloqueado su página web.

Todo apunta que el bloqueo tiene directa relación con las declaraciones del primer ministro de Gran Bretaña, David Cameron, quien dijo ante la Cámara de los Comunes –al ser consultado sobre las protestas en Hong Kong- que China debe respetar lo pactado en 1997. “Se trata de derechos y libertades que implican los de expresión, asamblea, asociación, movimiento y, por tanto, el de manifestación. Son derechos y libertades fundamentales garantizados conjuntamente por dicha declaración, que debemos defender (…) La democracia debe implicar una capacidad de elección real”, sentenció Cameron en relación al pacto chino-británico que regula el destino de los hongkoneses.