Día Mundial contra la Pena de Muerte: aumentan por causa de solo tres países

22 países en todo el mundo aplicaron entre el año pasado y el presente, penas de muerte: aproximadamente unas 18.000 personas, aguardan en el «corredor de la muerte» su ejecución en las circunstancias más distintas, pero todas ellas a su vez, condenables.

En países como Japón, Egipto, y Botsuana, a las personas sigue sin informárseles, así como tampoco a sus familiares ni abogados, la inmediatez de la próxima ejecución.

En cuanto a la cifra de condenados, bien podrían ser más, ya que países como China y Bielorrusia, siguen considerando el tema «secreto de Estado» y no brindan información alguna al respecto. Las penas de muerte, son aplicadas muchas veces por delitos que carecen de las condiciones jurídicas que acorde a las normas mundiales de derechos humanos, podían implicar la sentencia extrema, como drogas, homosexualidad consentida, blasfemia y apostasía.

En 10 años 31 países abolieron la pena, pero sigue en aumento

Amnistía Internacional, reconoce que en los últimos diez años 31 países han abolido la pena capital, no obstante lo cual y a expensas de un pequeño grupo de naciones en Medio Oriente, las cifras vuelven a estar en aumento. En Irak e Irán, las ejecuciones se multiplicaron con lo que para el fin de 2013, se ejecutaron unas cien personas más que en 2012, un aumento del 15%.

“Los auténticos festines de muerte registrados en Irán e Irak han sido una vergüenza. Pero los Estados que se aferran a la pena de muerte se ubican a contracorriente de la historia y, de hecho, están cada vez más aislados. Sólo un pequeño número de países llevaron a cabo la gran mayoría de esos absurdos homicidios patrocinados por el Estado. No pueden invertir los avances generales ya realizados hacia la abolición», sentenció Salil Shetty, secretario general de Amnistía Internacional.

“La tendencia a largo plazo es clara: la pena de muerte está empezando a ser algo del pasado. No obstante, instamos a todos los gobiernos que matan todavía en nombre de la justicia a que impongan de inmediato una moratoria de la pena de muerte con miras a abolirla», agregó el jerarca de AI.

China sigue encabezando la lista de países que condenan a muerte y aunque se desconoce el número exacto se estima serían millares cada año. En 2013, le siguieron Irán (369); Irak (170); Arabia Saudí (79) y Estados Unidos (32).