EE.UU. rompe bloqueo del Estado Islámico para rescatar civiles al norte de Irak

El Pentágono había emitido un comunicado a primera hora del jueves donde señalaba que la posibilidad de evacuar a miles de civiles que estaban refugiados en el monte Sinyar “es mucho menos probable”, en tanto los bombardeos de los aviones norteamericanos habían hecho retroceder el asedio de las fuerzas del Estado Islámico, contra los civiles que se escondían en la montaña.

El Pentágono señaló que buena parte de quienes estaban en las estibaciones de la montaña había logrado huir, tras “los bombardeos selectivos de Estados Unidos, la ayuda humanitaria y a los esfuerzos de los soldados kurdos”.

La evacuación masiva no sería necesaria pero seguirán bombardeando

El Departamento de Defensa reconoció haber “constatado que hay muchos menos yazidíes en el monte Sinyar de los que esperábamos” y que los suministros básicos que les hicieron llegar permitieron evitar una evacuación masiva que se estaba preparando por parte de los militares.

“No tendremos que hacer la gran operación militar que pensamos que tendríamos que hacer en esa montaña”, afirmaron los militares, que temían encontrarse ante decenas de miles de yazidíes, cristianos y kurdos, en situación de absoluta emergencia. La cifra ha quedado reducida a miles, pero ello no impedirá que los aviones sigan bombardeando las posiciones de Ejército Islámico, que, en principio parecen haber retrocedido.

En los últimos días el Ejército norteamericano ha estado proveyendo de armas a los kurdos que resisten los avances del EI, lo que mejoró la posición de las defensas de Irak, que habían perdido buena parte del territorio norteño de la nación. EE.UU. está apoyando con drones además, los ataques de la contraofensiva kurda, pero los resultados entienden los observadores, demorarán en ver si son efectivos o simplemente el EI se replegó tácticamente.