La depresión es la primera causa de enfermedad y tercera de muerte en los jóvenes

El informe publicado este miércoles por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es el primero en la historia de la organización a nivel global, procurando determinar el estado general de los jóvenes entre los 10 a los 19 años. La conclusión más resaltante es que detrás de los accidentes de tránsito y el SIDA, la mayor causa de muerte entre la juventud es a consecuencia de las depresiones. El fenómeno afecta además a los adultos directamente, en tanto la mitad de las personas que desarrollaron patologías mentales, sufrieron los primeros síntomas cuando tenían entre 13 y 15 años.

La mortalidad juvenil prevalente la de los accidentes de tránsito muestra una disparidad muy fuerte acorde al género: por cada muchacha fallecida en un accidente de tránsito mueren tres varones de la misma edad. En la segunda causa de muerte –el SIDA- existe perplejidad de los técnicos, ya que mientras en la mayoría de los grupos de población, la mortalidad por esta patología disminuye, en los jóvenes está en aumento, particularmente en África.

La mortalidad juvenil cae fuertemente en embarazos y partos

Como contrapartida de las situaciones que se agravan, el informe de OMS revela que las muertes en las jóvenes, derivadas de complicaciones del embarazo o el parto, se han reducido a casi la mitad, en varios de los puntos más conflictivos del planeta. Desde 2000, en el sudeste de Asia, la tasa de mortalidad por esas causas bajó un 57%, también un 37% en África y hasta el 50% en el Mediterráneo Oriental.

La mortalidad materna sigue siendo no obstante la segunda causa de muerte entre las mujeres de 15 a 19 años, solamente superada por el suicidio.

A nivel de ambos géneros, la OMS destaca que existe un retroceso en la cantidad de ejercicio que practican los jóvenes, donde solo uno cada cuatro hace al mínimo una hora diaria de prácticas suficientes como para optimizar su estado de salud. Ello ocasiona que los índices de sobrepeso y obesidad estén creciendo constantemente, con especial énfasis en los países en desarrollo y para la organización el abandono de la costumbre de ir caminando a la escuela o secundario y la falta de obligatoriedad en la materia “educación física”, son determinantes.