Caso “Eccehomo” en China arruina ancestrales pinturas de valor universal

Dos funcionarios municipales del templo de Yunjie, en la provincia nororiental china de Liaoning, han sido destituidos en principio, y aguardan las medidas que la justicia les imponga, tras haber hecho un desarreglo similar en un mural de la Dinastía Quing, comenzada en 1644. La obra está en uno de los puntos de convocatoria turística de la región y la “restauración” fue descubierta no por los visitantes, sino por un internauta asiático.

Dejaron los personajes casi como los de dibujos animados

Los funcionarios se atribuyeron la potestad artística de mejorar los murales por lo que procedieron a pintarlos con colores del mejor gusto oriental: son tan chillones que parecen más dibujos animados asiáticos que reproducciones de la época.

Un internauta de nombre Wujiaofeng, colgó las fotos comparativas del “antes” y el “después” de la obra en Weibo –la versión china de Twitter- donde criticó duramente a las autoridades que habían permitido tal estropicio de una obra de valor universal.

Las autoridades abrieron una investigación que ha costado ya varias cabezas: primero los que restauraron; después el responsable del templo, y ahora el Jefe del Partido Comunista local, enfrenta cargos de negligencia.

China está siendo acusada cada vez más por el poco cuidado que presta a los monumentos culturales de valor absoluto: las últimas denuncias afirman que tramos de hasta cien metros de la Gran Muralla han sido demolidos para sustentar el pavimento de carreteras. En Pekín, solamente sobreviven 400 de los otrora 7.000 hutong, los tradicionales callejones con casas bajas de ladrillo gris, que fueron construídos en la época imperial.