Guadalajara: cientos de ciclistas desnudos reclaman mayor seguridad en la calle

“Hacemos esto para mostrar el cuerpo, que es frágil, para decirle a la gente que nos debe respetar, porque con su vehículo nos pueden matar. No somos como el que va en el auto, que el golpe es para el auto, si nos atropellan podemos morir. Hay que recordarle a la gente que estamos vivos y estamos dañando la única casa que tenemos. Este año hay más gente porque comparten la ideología y el sentimiento de que la bici es nuestra herramienta y no tenemos que ser tan dependientes del petróleo”, explicó José Luis Ortiz, uno de los convocantes.

El “body painting” fue el mayor destaque de la jornada

La tercera convocatoria para esta marcha, que ha sido también la más nutrida, tuvo como estrella absoluta al “body painting”, donde centenares optaron por las más variadas pinturas, colores, y dibujos sobre sus propios cuerpos, con el fin de llamar la atención y también de no lucir en cueros simplemente.

La palabra “FRAGIL” en distintos colores y tamaños, predominó sobre los cuerpos, así como declaraciones que iban desde el amor a pedalear, a no contaminar con gasolinas, y al reclamo a las autoridades por nuevas ciclovías.

Los casi 2.000 pedaleantes  recorrieron 19.5 kilómetros de las principales avenidas, como Hidalgo, avenida México, Revolución, 16 de Septiembre, Washington y otras y concluyeron en la glorieta a los Niños Héroes a donde llegaron gritando: “Sí se pudo” y “Otra vuelta”. Allí cumplieron un minuto de silencio en homenaje a los ciclistas muertos en este último año -110 en doce meses corridos- el último de los cuales falleció horas antes de la misma marcha.

Los desnudos se vistieron en la misma plaza y emprendieron su regreso a casa, sin más.