Prótesis mamarias: objeto de juicio en Francia y de denuncia artística por «alienación»

Una artista plástica francesa ha utilizado prótesis mamarias, actual objeto de un megaproceso en Francia por engaño y estafa, como forma de denunciar la alienación que padecen las mujeres, sometidas a los cánones de belleza impuestos por la sociedad occidental.

En el marco de las celebraciones de Marsella (sur) como capital europea de la cultura en 2013, la instalación artística es un «acontecimiento de una sola noche», según la artista Camille Lorin, visible en la piscina Frais-Vallon, en el norte de esta ciudad.

Suspendidas del techo en medias de rejilla, las 300 prótesis mamarias proceden directamente de la fábrica Poly Implant Prothèse (PIP) de Seyne-sur-Mer, tercer suministrador mundial de este tipo de prótesis.

Cinco dirigentes de PIP son juzgados desde el miércoles por un tribunal de Marsella por «engaño agravado» y «estafa». Según las autoridades sanitarias franceses una cuarta parte de las prótesis PIP retiradas desde el inicio del escándalo eran defectuosas, y generaban reacciones irritantes, inflamatorias, aunque sin riesgo demostrado de cáncer.

«Las medias de rejilla son un atributo femenino, y al mismo tiempo algo frágil, que puede romperse», como se rompieron las prótesis PIP en el interior de las 5.250 mujeres querellantes, partes civiles en el proceso, explicó la artista a la AFP.

«La idea es el encierro en el que se encuentran las mujeres para corresponder a los cánones de belleza que la sociedad les dicta», añade la artista. Es una forma de «acceder al modelo femenino occidental», lo que tiene un aspecto «alienante», opina Camille Lorin.

Mediante esta efímera instalación, la joven artista de 32 años afirma querer lanzar «una mirada sobre una época que nos dibuja y nos deforma». AFP