Chávez: “insuficiencia respiratoria” no cede, mantiene “contacto con el gobierno”
El misterio que rodea el estado de salud del presidente venezolano Hugo Chávez, se develó parcialmente cuando en cadena nacional de radio y televisión, el ministro de Información, Enrique Villegas, anunció que “la enfermedad de base sigue sin efectos adversos significativos”. Agregó que el mandatario está en contacto permanente con su gobierno, pero reconoció que a nivel de salud, “la insuficiencia respiratoria persiste y su tendencia no ha sido favorable”.
Villegas dio en nombre del gobierno nacional, un saludo de agradecimiento a todos quienes se manifestaron en las calles desde que se supo que el presidente venezolano había regresado de Cuba, y dijo que Chávez está “en comunicación con familiares y allegados” y además “sigue aferrado a Cristo”.
La última cadena nacional sobre el estado de salud presidencial había sido el 15 de febrero cuando se confirmó que Chávez está respirando por una cánula traqueal, tras que el 23 de enero se había informado que el mandatario había “remontado la cuesta”.
Aumenta la tensión en cercanías del Hospital Militar
Mientras que grupos de apoyo al presidente bolivariano, literalmente han pasado desde su regreso en las inmediaciones del Hospital Militar donde está internado el paciente, dando permanente señal de apoyo al gobierno, movimientos estudiantiles reclaman saber el estado real de salud del mandatario y amenazan con movilizaciones hacia el centro de salud castrense.
El reclamo principal está centrado en saber si Chávez está en condiciones de reasumir la presidencia y algunos dirigentes han dicho que “el movimiento estudiantil se dirigirá a las puertas del Hospital Militar”. No obstante existen fuertes corrientes “chapistas” dentro de los claustros universitarios que evitarían cualquier movilización de masas que empujara una decisión urgente en torno a la sucesión eventual de Chávez.
Te recomendamos
play_arrow
en tono mesiánico
La cadena nacional de Javier Milei: entre el tono mesiánico y la autoalabanza
El mandatario ultraderechista habla en tono triunfal, mesiánico y, casi siempre, autocomplaciente: asegura que sus cambios son “históricos” y cuela en el discurso pasajes místicos y diatribas contra sus detractores.
Compartí tu opinión con toda la comunidad