Tsunami de furia antijaponesa en China por cierre de grandes empresas niponas
El problema está mucho más allá de simples negocios de japoneses en el continente: las fábricas de electrónica más importantes que Japón tiene radicadas en China, cerraron.
El sábado, la mayor de las filiales, Panasonic, perdió dos de sus fábricas a manos de turbas enardecidas que las invadieron y destrozaron. Decenas de tiendas japonesas han sido blanco de ataques de activistas chinos, según informa la cadena de televisión china NHK. La embajada de Japón en Pekín, ha sido rodeada por un triple vallado militar para evitar que los miles de manifestantes que a diario protestan a sus puertas puedan atentar contra la sede diplomática.
Todos los ciudadanos nipones, residentes en China, han sido conminados a permanecer en sus casas. La Policía ha reforzado el patrullaje en los barrios tradicionalmente ocupados por nipones para evitar ataques.
Tres de cinco islas
En 85 ciudades chinas se denunciaron incidentes contra la colectividad japonesa o sus intereses, desde que la semana pasada el gobierno de Japón decidió comprar a un particular la propiedad de tres de las cinco islas de Senkaku, que están en diferendo limítrofe entre China y Japón. Si bien el litigio continuará, los japoneses adquirieron la propiedad a un privado en unos 30 millones de dólares.
Desde entonces se han planteado desde boicots a los productos japoneses que se venden en China, hasta reclamos del viceministro de comercio chino, quien advirtió que la compraventa de las islas tendrá consecuencias negativas en el relacionamiento comercial.
Te recomendamos
La cadena nacional de Javier Milei: entre el tono mesiánico y la autoalabanza
El mandatario ultraderechista habla en tono triunfal, mesiánico y, casi siempre, autocomplaciente: asegura que sus cambios son “históricos” y cuela en el discurso pasajes místicos y diatribas contra sus detractores.
Compartí tu opinión con toda la comunidad