Presidente de Cuba arriba a China en su primer viaje al extranjero desde que asumió

El viaje de Castro se realiza en un momento de particulares cambios económicos en Cuba, en tanto el año pasado se abrieron pautas para emprendimientos privados por parte de los ciudadanos, así como la reducción del funcionariado público.

Cuba podría copiar varios aspectos del sistema chino que mantiene una economía rural con iguales lineamientos que durante la revolución de Mao, y a la vez un activo mercado privado que incluye herramientas financieras de Occidente.

Oficialmente los medios de La Habana no han dado mayor información sobre el viaje de Raúl Castro que incluye una posterior escala en Vietnam.

El complejo equilibrio con China

Entre los aspectos prioritarios de la visita se encuentran las relaciones comerciales entre Cuba y China que, como ocurre a casi todo el mundo, son ampliamente favorables a la potencia asiática. No obstante los chinos han dado prioridad a muchos artículos vendidos por Cuba, que enfrenta en los países occidentales el embargo decretado por Estados Unidos.

China pasó un intercambio de 590 millones de dólares con Cuba, en 2008, a 1.810 millones en 2010. Pekín invierte en transporte, petróleo, equipos electrodomésticos y de comunicación, además de ser fuente de créditos.

Cuba fue, en 1960 el primer país latinoamericano en establecer relaciones diplomáticas con el régimen comunista chino y el vínculo ha sorteado incluso la desaparición de la Unión Soviética.

Después de Pekín, el presidente cubano viaja a otro país comunista asiático: Vietnam, donde una reforma del sistema económico planificado a uno más liberal, está en marcha.