Cistitis "de la luna de miel"

Algunas mujeres tienen síntomas de cistitis y micciones dolorosas cuando tienen relaciones sexuales. Generalmente duran un día y luego desaparecen hasta que vuelven a tener relaciones.

El problema, llamado «cistitis de la luna de miel», es una forma de uretritis crónica, siendo la uretra, y no la vejiga, la inflamada.

En la mayoría de los casos, los síntomas son causados por una infección conocida con el nombre de Clamidia.

Sin embargo, si se han utilizado sprays higiénicos femeninos, toallas higiénicas perfumadas o baños de agua aceitosa, éstos pueden haber irritado la uretra y ser responsables de la molestia.

Otra posibilidad es que la uretra haya sido golpeada durante la actividad sexual (por esto es la alusión a la «luna de miel»).

Si la causa son los productos utilizados, el problema debe desaparecer si se los suprime. Si no fuera así, se impone la consulta a un médico, que deberá solicitar un examen para identificar las bacterias. Normalmente, el tratamiento consiste en un antibiótico.

A veces, los análisis de laboratorio no encuentran el microorganismo responsable, y algunas mujeres continúan con los síntomas incluso después de administrado el antibiótico. En esos casos, los médicos suelen recomendar medidas preventivas: tomar antibióticos como la Nitrofurantoina en dosis bajas o Trimetropin/Sulfametaxozol cada vez que se tenga relaciones sexuales.

Hay otras medidas no medicamentosas: lavar los genitales y la zona anal con un jabón suave y agua, asegurarse de que el pene del compañero está higienizado antes de tener relaciones sexuales, y vaciar la vejiga inmediatamente después de ellas, para expulsar la bacteria fuera de la uretra. También se puede utilizar un lubricante soluble al agua antes de la relación sexual, para que la penetración sea más fácil y menos opresiva. No emplear vaselina, porque contribuye a la multiplicación de los gérmenes.