¿Por qué debemos eliminar el azúcar blanco de la dieta?
El azúcar refinado es considerado uno de los "venenos blancos" de la cocina y deberíamos al menos disminuir su consumo.
El azúcar es un alimento esencial para muchas personas, pero consumirlo en exceso puede afectar el funcionamiento del organismo, y por lo tanto nuestra salud.
El azúcar refinado es por ese motivo considerado uno de los «venenos blancos» de la cocina junto a la sal, la harina, la manteca y para algunos nutricionistas también la leche de vaca.
La glucosa es fundamental para que el organismo produzca la energía necesaria para poder llevar a cabo todas las actividades del día a día, pero ésta se puede adquirir de otros alimentos como los carbohidratos completos, las proteínas y las grasas saludables.
Los expertos en salud alimentaria recomiendan evitar el consumo de azúcar blanco, o al menos disminuirlo o no agregarle a las preparaciones, ya que muchos alimentos que compramos en los supermercados ya lo contienen.
Lo más difícil para quienes están acostumbrados a su sabor es prescindir de él, pero hay muchos alimentos naturales y saludables que pueden cumplir la función de endulzar comidas y bebidas.
¿Por qué deberíamos eliminar el azúcar de la dieta?
El consumo de azúcar está directamente relacionado con la diabetes y el problema como ya mencionamos no es sólo el azúcar que utilizamos para cocinar, sino lo que ya contienen otro tipo de productos que consumimos como los refrescos. Incluso productos «salados» contienen entre sus ingredientes azúcar.
Diversos estudios encontraros además que un exceso de fructosa en la dieta reduce la habilidad de aprender y memorizar, mientras que es un gran enemigo de la salud bucal y responsable de la aparición de caries y otros problemas dentales.
Otras investigaciones también alertan que una dieta alta en azúcar puede cambiar la flora intestinal en solo 24 horas. Los desequilibrios en las bacterias del estómago producen inflamación, malas digestiones, y debilitan el sistema inmunológico.
El alto consumo de azúcar está también directamente asociado con la obesidad, al tiempo que altera el equilibrio entre el colesterol bueno y malo.
Al igual que la sal, el consumo excesivo de azúcar puede provocar deshidratación.
Compartí tu opinión con toda la comunidad