Croquetas de acelga

• 1 kg. de hojas de acelga
• 1 cebolla pequeña
• 45 gr. de piñones (a gusto)
• 20 gr. de harina
• 2 huevos (uno cocido y otro crudo)
• 250 ml. de leche templada
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• 400 gr. de pan rallado
• aceite de girasol
• sal a gusto

Preparación

1. Lavamos las acelgas, las troceamos y las hervimos durante 5 minutos en agua con una pizca de sal.

2. Las escurrimos bien en un colador grande, apretando con una cuchara o con la mano del almirez. Es importante prestar atención a este paso para que las acelgas no suelten líquido sobrante y luego al hacer la masa de las croquetas, ésta nos quede con la textura que buscamos.

3. Picamos la cebolla muy finita. En una sartén con dos cucharadas de aceite de oliva, la ponemos a rehogar hasta que quede transparente.

4. Añadimos las acelgas a la sartén, mezclamos bien y dejamos rehogar durante 5 minutos, dando vueltas constantemente con una cuchara de madera.

5. Añadimos los piñones y el huevo duro bien picadito. Damos vueltas para mezclarlo todo bien y añadimos la cucharada de harina. Seguimos mezclando y sin dejar de dar vueltas, vamos añadiendo la leche templada poco a poco, hasta que nos quede una pasta consistente.

6. Pasamos la masa de la sartén a un plato llano o a una fuente y extendemos bien. Tapamos con film transparente y dejamos reposar hasta que la masa se enfríe (lo mejor es hacerlo de un día para otro).

7. Cuando la masa se haya enfríado, tomamos una cantidad pequeña con la mano y hacemos bolitas (también puedes hacer una forma alargada). Pasamos la bolita por una superficie sobre la que hemos esparcido el pan rallado, pasamos por el huevo batido y de nuevo sobre el pan rallado, hasta que la croqueta quede bien cubierta por todos los lados.

8. En una sartén honda con aceite de girasol muy abundante y a fuego medio-alto, vamos friendo las croquetas, teniendo cuidado de que no se nos quemen por fuera.

9. Una vez fritas, retiramos las croquetas de la sartén y las depositamos sobre una fuente con papel de cocina absorbente para que chupen todo el exceso de aceite. Servir tibias