¡Estos son otros López! ¡Seres humanos corruptos, que amenazan extinguir la sociedad humana!

En estos días repercute en Argentina el descubrimiento irregular millonario en billetes dólares. Son 9 millones de dólares, billete a billete, todos empaquetados para esconder en un monasterio.

El ex secretario de la Nación Argentina, del ministerio de Transporte y Obras Públicas, José López, fue descubierto en forma por demás sospechosa y muy extraña, “depositando” como si fuera en un banco, en un centro religioso.
Siguen cayendo personal de confianza de los gobiernos Kirchneristas, en este caso, responsables de las principales licitaciones millonarias de obras públicas de la Argentina.

Se que no es adecuado, ni correcto comparar sectores políticos de la región. No es lo mismo la izquierda argentina, ni tampoco la izquierda brasilera, y mucho menos la izquierda venezolana. Tampoco nuestra izquierda, tiene comparativos con la región. Sin embargo, siendo yo una persona de izquierda, me cabe la de la ley, pensar, descubrir, desmadejar, cuestionarme, cuestionarnos, y finalmente analizar “¿qué miércoles está pasando en la región sudamericana?”.

¿Serán otros López? O quizás simplemente para el bochorno, y la denigración de las sociedades. La corrupción, los ambiciosos del poder, y del enriquecimiento a costas de los más débiles, siguen existiendo sin importar la divisa.

¡Son simples seres humanos! ¡O más que simple, complejos seres humanos! De esos que existieron, existen y existirán, para males de muchos. Esa especie que les pega a los más débiles. ¿Y quienes son los más débiles? Son aquellos que padecen, que sufren, y viven la vida en la miseria, angustias, tristezas y más tristezas.
Porque a esta red de corrupción e ilícitos, se abren otros caminos y justificaciones, para los mafiosos, chorros y balandros, de la droga, los robos y todo tipo de delincuencia.

Que también padecen, no solo los tan débiles, sino también aquellas personas sociales que luchan día a día, por mantenerse en esta sociedad, en la correcta forma honorable, de amor y respeto por nuestros iguales.
En este descontrol cambalachero, de que quien no roba es un gil, la vida va transcurriendo, pero sin darnos cuenta que todos juntos, ¡todos!, nos estamos hundiendo, y en el mismo lodo revolcados.
Que en el mañana, nuestras próximas generaciones, si es que existen, deberán convivir con toda esta miseria, y esa es la herencia maldita.

Por que el que “a hierro mata a hierro muere”. La vida es un sin fin de vivencias elípticas, que se cruzan una y otra vez, y en algún caminos nos encuentra, a vos, a mi, a nuestros hijos, nietos o tataranietos.
Esta muestra de seres humanos, que no se cansa de corromperse, es la enfermedad, que es epidemia, será pandemia y nos terminará por extinguir.

Será mejor volver a ser primitivos, dar las cartas de nuevo, y comenzar, mientras halla tiempo, una nueva era.
Porque el mañana sea de otros López ¡Pero de los buenos!

Donde podamos apoyarnos en virtudes loables, benignas, y por sobretodo “honorables”.

¡Hablo de recuperar valores!