Menores infractores y la educación postergada

Docentes de Colonia Berro se han reunido en Asamblea Gremial para pensar en una alternativa posible y asuntos laborales. Esto generó resquemor en muchos lugares. Sobre todo en los cargos más altos. ¿Desconocen los derechos esenciales de los trabajadores? En muchos años de trabajo no había una sala de profesores, y nunca hubo una cartelera gremial. El trabajo, que dista de ser óptimo en calidad e infraestructura, forma parte de un convenio entre INAU y CES, por lo que hay injerencia de dos organismos que hicieron un convenio y se debe cumplir. El haberse reunido generó la poco feliz expresión de que «peligra el convenio», sobre todo para asustar y generar miedo a un colectivo de docentes que tienen todo el derecho del mundo a agremiarse. Discusiones internas, frases poco acertadas, sembrar el miedo hacia los trabajadores e imposibilitar que quienes trabajan allí no tengan una voz propia, no puedan pensar en alternativas y denunciar carencias es peligroso, sobre todo cuando los afectados son los gurises, postergados, marginados y fuera de la sociedad que los excluyó.
¿Podemos hablar de rehabilitación, podemos hablar de reinserción, cuando hay intereses que no son en el fondo los jóvenes? ¿Se puede lesionar el derecho a pensar alternativas socio-educativas a las ya existentes?

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