Cuba, México y la OEA

Fidel Castro Ruz, Lázaro Cárdenas del Río y su amigo guatemalteco, Jacobo Arbenz (1951-1954) desconfiaron siempre del proyecto supuestamente democrático de la llamada Organización de Estados Americanos (OEA). Un grupo de economistas y sociólogos michoacanos visitó La Habana en el año 1960. En dos meses recorrieron otras ciudades y municipios de las provincias en la patria de José Martí. Allí fueron testigos de acontecimientos clave que ahora forman parte de la historia: la explosión del barco La Coubre, el viernes 4 de marzo de 1960 y la expropiación de 8 mil 175 caballerías de tierra, que usurpaba la empresa estadounidense United Fruit Company, en la primera semana de abril, hace 55 años.

Cuba y México, sus gobiernos, con la excepción de las administraciones panistas de Vicente Fox Quesada (2000-2006) y de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012), y sus pueblos han fortalecido sus relaciones culturales y diplomáticas en estos 55 años, a pesar de las amenazas de los presidentes de Estados Unidos en tiempos de John F. Kennedy (1961-1963), con la invasión a la isla caribeña en abril de 1961 y las agresiones realizadas durante las presidencias de Lyndon B. Johnson (1963-1969); Richard Nixon (1969-1974); Gerald Ford (1974-1977); Ronald Reagan (1981-1989); George Herbert Bush (1989-1993); Bill Clinton (1993-2001); George Walker Bush (2001-2009) y Barack Obama desde el 20 de enero de 2009, quien anunció en diciembre de 2014 su decisión de establecer relaciones con Cuba.

Los integrantes de asociaciones culturales y políticas cubanas y mexicanas que participan en estos días de la Cumbre de los Pueblos en Panamá han recordado la valentía de dos mexicanos que se opusieron al bloqueo estadounidense contra Cuba y a las sanciones de la OEA. Gilberto Bosques Saldívar, poblano universal que se desempeñó como embajador de México en La Habana, ha inspirado a los hombres y mujeres libres de nuestra América. Adolfo López Mateos (1958-1964), el único presidente en el continente, en aquella época, que rechazó el aislamiento a la hermana nación y mantuvo relaciones fructíferas entre mexicanos y cubanos.

Dos cumbres se realizan en la patria de Omar Torrijos Herrera (1969-1981). El encuentro de campesinos, estudiantes, intelectuales, obreros, hombres y mujeres convocados a la reunión de pueblos de nuestra América por la paz, la justicia social, el respeto a la soberanía de la naciones y la solidaridad particularmente con la República Bolivariana de Venezuela, porque las agresiones del imperio estadounidense a la patria querida de Hugo Chávez Frías (1998-2012) constituyen también un irrespeto a la dignidad de los pueblos cubano, mexicano y a sus hermanos de las naciones centroamericanas, suramericanas y caribeñas.

La solidaridad mexicana que se manifestó hace 55 años, ante el criminal sabotaje al barco La Coubre en La Habana, se mantiene firme en 2015. Los herederos de Adolfo López Mateos, Gilberto Bosques Saldívar y Lázaro Cárdenas del Río se pronuncian ahora por la integración de la Patria Grande que José Martí llamó Nuestra América y exigen al presidente estadounidense, Barak Obama, derogar el decreto guerrerista contra Venezuela Bolivariana, suspender sus amenazas y comprometerse a respetar la esperanza que hoy significa la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), nacida en territorio cubano en diciembre de 2004, como resultado de la voluntad integradoras de dos presidentes comprometidos con sus pueblos: Fidel Castro Ruz y Hugo Rafael Chávez Frías.

“Prosperidad con equidad. El desafío de la Cooperación en las Américas” es el tema central de la VII Cumbre de las Américas en Panamá, donde el presidente anfitrión, Juan Carlos Varela Rodríguez, recordó la importancia de mantener un diálogo regional y promover la paz. Ahora que la República de Cuba está presente en ese foro, como lo habían exigido Rafael Correa Delgado, presidente de Ecuador y José Mujica Cordano, su entonces colega uruguayo, desde el año 2012 en el encuentro realizado en Cartagena, Colombia, será importante que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama y Roberta Jacobson, sub Secretaria de Estado, conozcan algo de la vida y obra de Gilberto Bosques Saldívar, el diplomático mexicano, promotor de la paz como cónsul general en París en 1939 cuando la guerra amenazaba a los pueblos de Europa.

Dos décadas después, con el triunfo de la Revolución Cubana, Gilberto Bosques, embajador en la Perla de las Antillas, ayudó a fortalecer la amistad entre las dos naciones con un espíritu de equidad, de cooperación en escenarios de revoluciones sociales del siglo XX. En 1959, las autoridades estadounidenses pensaron que podían seguir influyendo en la vida interna de los cubanos. Les molestó las primeras medidas destinadas a la reforma agraria en favor del campesinado. Fidel Castro realizó una visita a Estados Unidos entre el 15 y el 28 de abril. Su mensaje fue clarísimo: “Las armas no son las cosas más importantes en el mundo; la moral de los hombres que pelean por los ideales es mucho más importante que todas las armas”.

Cesar el bloqueo criminal a Cuba y no incluir el nombre de una nación solidaria entre la lista de naciones que según Estados Unidos, patrocinan el terrorismo, es una exigencia ciudadana en Panamá, independientemente del saludo protocolar entre los mandatarios Raúl Castro y Barack Obama. “Con OEA o sin OEA, Cuba ganará la pelea”, expresó en 1960 el cantor y poeta colombiano Alejandro Gómez Roa. En este mes de abril de 2015 Cuba avanza con caballerosidad, dignidad y diplomacia hacia una nueva relación con el gobierno de Estados Unidos manteniendo sus principios martianos y socialistas.