El País panqueque

¡Cómo el Uruguay no hay!
Mientras que la oposición Venezolana se aprestaba, con la bendición yanqui, a seducir pilotos y robar aviones para bombardear Caracas, en un golpe cívico militar que no tardaría en solicitar la intervención militar extranjera en el país, provocando , como lo hizo la aviación argentina en 1955, cuando sus sublevados aviadores bombardearon , un medio día del 16 de junio, la plaza de Mayo , la casa de gobierno, la residencia del Presidente Perón, y otros blancos, asesinando a cientos de civiles, incluidos vehículos escolares… todo ello con el respaldo diplomático de la embajada norteamericana en Argentina, y el silencio cómplice y criminal del gobierno uruguayo de turno, que brindó asilo político a los traidores militares sublevados…. Uruguay, en los años de la década peronista, 1945-1955, se destacó por la cipayesca actitud de la diplomacia del canciller Larreta. Parece que, luego de nuestro interregno americanista, con el digno canciller Almagro, el “país panqueque”, pone un canciller larretista al frente, comienza a renegar de la solidaridad americana. No es posible que Uruguay llame” oposición democrática” a bandas armadas y financiadas por la embajada norteamericana, a la intromisión descarada de los diplomáticos norteamericanos en Venezuela como en Argentina, “acaudillando” a las fuerzas que perdieron las elecciones , que no han podido, pese a su hegemonía mediática convencer a los pueblos de sus políticas, ya probadas, por otra parte en décadas de infame y miserable entrega. Lo menos que puede esperarse de un gobierno nacional que presumió de americanista, es el desconocer la legitimidad del gobierno de la mayoría de defenderse del terrorismo mercenario que, financiado desde fuera, pretende instalar la zozobra en el seno de los pueblos americanos. El desconocer la intromisión norteamericana en los asuntos de Argentina y de Venezuela, los sabotajes a Petrobrás en Brasil, las campañas mediáticas de las grandes cadenas, CNN, OGlobo, Clarin, Caracol, etc, en contra de los gobiernos populares, con campañas infamantes a los gobernantes elegidos por los pueblos, incitando al odio de casta, sustento de todos los genocidios ya sufridos por estos pueblos. Medios que no se resignan a que, pese a ellos, lograron el apoyo popular a sus gestiones, es un insulto a la inteligencia de los frentistas. La defensa de los derechos humanos no tuvo ni tendrá la necesidad del aval de Norteamérica, pues cuando estos derechos fueron conculcados criminalmente, lo fueron por agentes al servicio del Departamento de Estado. Todos los crímenes sufridos por los pueblos americanos a manos de los 70.000 merecenarios salidos de la “escuela de las américas” durante medio siglo, las invasiones a Nicaragua, Panamà la guerra sucia en Colombia, los 3000 desaparecidos en el Río de La Plata, etc. Inhabilitan a cualquier gobierno norteamericano a hablar de “derechos humanos “ en América, sin mirarse a sí mismos, a como tratan a sus propias minorías raciales, a sus pobres y a sus prisioneros. Por lo expuesto no podemos dejar de indignarnos ante las expresiones claudicantes del canciller Nin Novoa, al cual, aunque inconsciente, el solo el respaldo del cipayaje rosado debería llenar de vergüenza.No lo pusimos ahí para que se nos mire en ese espejo. Así pues, a la ofensiva continental desplegada por Tío Sam sobre el continente, con el bálsamo de una apertura con la Cuba de Fidel, se concentran en descalabrar a los gobiernos de Venezuela, Brasil y Argentina. Al Uruguay se lo ve como un panqueque, que puede darse vuelta en el aire, poniendo a la vista la cara que necesita el que sostiene el sartén por el mango.

error_outline

Los comentarios publicados en esta sección son entera responsabilidad de su firmante, y no necesariamente representa la posición de LARED21

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje