Ya no soy el mismo

Seguimos con el eslogan “algo hay que hacer”, pero parece ser que el ser humano creo el sistema, y es como una bomba de tiempo, es más, cada vez se hace más inexpugnable. Se creo algo monstruoso, que hace que lo negativo se haga como una bola de nieve, rodando y rodando, creciendo más su tamaño de destrucción y autodestrucción, de lo que es nuestras vidas.
Nuestro hijos tendrán sus hijos, sus hijos los de ellos, pero….¿ en que sociedad vivirán, que vida tendrán?.
Hace unos días, llego del trabajo con mi compañera, a mi casa (Barrio Pueblo Victoria, hermano de La Teja). Llego en mi único vehículo, desde hace 8 años, una moto suzuki 125 ts, abro el candado del portón, camino unos diez metros, abro la puerta, con intención de dejar los cascos, hablamos 3 palabras, no me había sacado el chaleco, miro hacia la puerta entreabierta, llego a ver el portón abierto, y la moto ya no estaba.
¡La moto exclame, la moto, me la robaron!, pasaron solo 180 segundos, y bastaron para sentir lo que muchos, y muchos ciudadanos viven a diario, cuando le sacan lo que es suyo. Soy uno más, a todos nos llega.
Corrí con el casco en la mano, 5 cuadras en forma alocada, intentando llamar al 911, lo logré me comuniqué: ¡Me robaron la moto!.
Desde ese 5 de septiembre, pasaron 10 días, en lo que me recorrí a diario, todos los barrios de Montevideo, mi mente estaba en estado de desquicio, a todos lados fui armado. Busque todas las zonas consideradas peligrosas, entraba y salía, hice muchas guardias en zonas estratégicas, vi en todo ese período, todo un sub-mundo, se sentía mucha marginalidad, no la de humilde, sino la del irrespetuoso de los derecho humanos, de nuestros derechos, de los que trabajamos dignamente.

Se les ve mover, como si la vida no valiera nada, como si el mundo de ellos, es diferente al nuestro. Y se les ve mover con tranquilidad, con soberbias y creyendo, que acá mandan ellos. Dos mundos, que creo será muy difícil de cambiar, y en eso no importan los gobiernos, es más grande que eso, es la Sociedad en su conjunto, es el sistema, que será muy difícil de cambiar.
Violencia, impunidad, victimas y victimarios, caminos desafortunados que a la larga o a la corta, nos llevará a decidir, o ellos o nosotros.
Hoy recobré la moto, después de tanto andar y andar, di con ella. Contar el como, y en donde, sería un tema muy largo, que me llevaría a entrar en otros terrenos, en lo que yo digo “El sistema esta mal, muy mal”.
Claro, ya no es la misma, ………….sin chapa de matrícula, deteriorada, dañada, me llevará unos cuantos pesos tenerla en el camino, igual ya no será la misma, tampoco, hoy………………………………………………………..yo ya no soy el mismo.
Rescato de todo esto, hoy en este día, que a mi familia le volvió la tranquilidad, ya el arma está en casa, en el lugar, en el que nunca se debió haber movido. Pero como dije antes, yo ya no soy el mismo.

 

 

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