Carta abierta al Intendente de Río Negro Dr. OMAR LAFLUF

Sr. Intendente de Río Negro
Dr. Omar Lafluf
Presente

Nací y crecí en San Javier, un pueblito hermoso, poético, cálido, poblado por un puñadito de personas que aman esa tierra y han tratado de crecer en armonía y en paz en un lugar encantador.
No siempre ha sido posible ya que la historia reciente de nuestro país nos deparó a los uruguayos, también momentos de mucho sufrimiento y desgarro. La historia de San Javier no es ajena a ello y usted lo debe conocer como todos los habitantes de nuestro querido departamento.

El tiempo intenta curar y cicatrizar heridas y por estos días estamos celebrando los 99 años de San Javier y ya se comienza a respirar un aire fresco y de orgullo por la próxima celebración de los primeros 100 años de vida de nuestro querido pueblo.
Con sorpresa e indignación, vimos como personal de la intendencia municipal, arrasó impunemente los hermosos árboles de San Javier en algo que eufemísticamente denominaron «poda».
No. No hubo poda, hubo lisa y llanamente un destrozo ambiental y se arrasó -además de los árboles íntegramente- el paisaje, el entorno natural y algo que podrá parecer menor pero no lo es, la sombra para los viejitos que caminan por las calles de San Javier en verano, paseando con sus nietos o sus hijos, muchos quienes -como es mi caso- tuvimos que emigrar de allí, dejando atrás a nuestros afectos y nuestra tierra para alejarnos físicamente, aunque nunca afectivamente.

Usted dirá, tal vez, que hayan arrasado los árboles de San Javier es un detalle menor frente a otros problemas más urgentes del departamento. No. No es un detalle menor, claro que existen otras prioridades, pero no es insignificante afectar la vida de un pueblito de gente buena, con una medida tan incomprensible.

Las agresiones no son insignificantes.

Las soluciones no parecen ser inalcanzables o costosas o acciones que ameriten esfuerzos titánicos para su gestión comunal.

A veces, muchas veces, con pequeños gestos podemos enmendar errores que se cometieron quiero creer que por distracción y no por deliberada omisión.

Espero una respuesta suya, para poder agradecérselo en nombre de mi familia que allí vive, de mi pueblo donde nací y me crié y de una comunidad de buena gente.

Espero también, poder agradecérselo personalmente, en los actos de celebración de los 100 años de nuestro San Javier querido.

Desde ya, muchas gracias por su tiempo y le saludo con mi más alta consideración y estima.

Ana Roslik
Ginebra, Suiza