TIENE LA PALABRA.

Comunicado de los barrios de Colón y Melilla

Señor Director de  LA REPÚBLICA

Dr. Federico Fasano Mertens

Estos son barrios abandonados y con muchas carencias.

Desde 2010 nos dejaron sin combustible (ni naftas ni gasoil ni keroseno).

Hemos solicitado entrevistas con las autoridades de Ancap pero nunca nos han respondido. Ni Raúl Sendic, ni Juan Gómez, ni Carlos Cammy nos citaron nunca a pesar de haber solicitado sendas entrevistas para plantear nuestras aspiraciones.

El Presidente de la República tampoco respondió a una carta que le enviáramos, al igual que el Directorio del Partido Nacional.

Le pedimos al senador Daniel Martínez por la estación de servicio de Lezica y Veraguas. Dicho establecimiento de venta de combustibles data de 82 años atrás, cuando allí se surtía alguna cachila y vendía 100 litros de nafta por mes. Hoy en día dicha estación empezó con un minishop y ahora tiene un gran supermercado que da de vivir a muchos empleados y vende 140 mil litros mensuales.

No sabemos quién manda en Uruguay, si el presidente o la multinacional Esso. Les recordamos a nuestros políticos que pronto vendrán con sus discursos electorales, pero no se imaginan el recibimiento que les espera aquí, en Villa Colón y Melilla; estamos dispuestos a demostrar una indiferencia total por el trato que nos dieron.

Queremos saber quién pone el palo en la rueda para que esta zona no progrese.

Por la Comisión Vecinal de Villa Colón y Lezica (en formación, Veraguas 1943

Teléfono 2322 8343):

NELSON MUSETTI,  PRESIDENTE

MARIO LUZARDO, TESORERO

DRA. LAURA  SATRAGNO, SECRETARIA

 

Gloodtdofsky y los enterramientos clandestinos

Señor Director de  LA REPÚBLICA

Dr. Federico Fasano Mertens

Con las noticias del momento, si me es permitido transcribiré mi carta publicada el 17 de diciembre de 2010 con el título «Gloodtdofsky, su comportamiento en Haití y los enterramientos clandestinos. En htpp:///www.terra.com.pr/noticias/articulo/html/act1026990.htm <//www.terra.com.pr/noticias/articulo/html/act1026990.htm> podemos obtener como antecedente, que el general Raúl Gloodtdofsky fue relevado de las fuerzas de paz en Haití, por haber increpado a oficiales de la Armada y de la Fuerza Aérea, acusándolos de haber traicionado al Ejército, dejándolos solos con el tema de los desaparecidos y que, insólitamente había sido el coordinador de las excavaciones en dos unidades de esa fuerza, los batallones 13 y 14.

Ya lo señalaba el informe de Serpaj en este sentido que, uno de los obstáculos para encontrar la verdad ha sido la búsqueda mal dirigida intencionalmente por este coronel (ascendido a general), que no había podido ocultar por más tiempo su simpatía con el accionar represivo de las Fuerzas Armadas durante la dictadura y con el pacto de silencio que han sellado los militares para ocultar la verdad sobre lo sucedido. Por lo que es muy bienvenida la información del diario plural del 8 y 10 de diciembre, ya que en febrero se retomarán las excavaciones comenzando con el batallón de Paracaidistas de Toledo Nº 14 y continuaría en el batallón Nº 13, donde el jefe del equipo de Antropología Forense de la Universidad de la República (Udelar), José María López Mazz, aseguró tener buena información sobre enterramientos clandestinos».

Quiero por este medio felicitar primero al Sr. López Mazz, y en segundo lugar a quien dando crédito al mismo, decidió la continuación de la búsqueda, el ex presidente Tabaré Vázquez.

Lo saluda atte.

PABLO MEDINA MEDINAPABLO21@GMAIL.COM

 

El arte moderno viene de Cezanne  y de África, el  posmodernismo de Disneylandia

Señor Director de  LA REPÚBLICA

Dr. Federico Fasano Mertens

Vendiendo cartulinas que pinté con paisajes de Río, en la feria diaria de la rambla de Copacabana, surgió la posibilidad de exponer en una galería de islas Fidji (se va desde el puerto peruano de El Callao, atravesando el Pacífico), lo que me afirma que la pintura es una cadena milenaria y planetaria. Picasso decía que el verdadero museo es un lugar mental. El bajorrelieve de Darío que marca el Zagreus como el viento de las estepas dibuja su moaré sobre las gramíneas similares a las que vieron pasar al gran rey. En Bagdad, el coloso de Hatra se mostró vaciando los sótanos del museo de Mosul, donde se acumulaban las efigies, madres de las Sasánidas y de las reinas de Palmira. El oriente eterno colma toda una historia bajo cuadros surrealistas iraquíes: jirafas en llamas y relojes blandos, junto a ex devotos ofrecidos a los dioses que detuvieron a César y vencieron a las legiones. Algunas divinidades precolombinas como la «serpiente emplumada» del Museo del Hombre, espera que llegue el cráneo de obsidiana de México, las hachas toltecas, las terracotas de nayarit, la astrología azteca. Al igual que el arte africano y el de las cavernas esperan a la puerta del Louvre. Pero ya la escultura azteca pertenece a la historia, tanto como la escultura súmera, y este arte, como el de África, debe más a los espíritus que a lo sagrado. El budismo, el hinduismo fueron recogidos por las estatuas de las catedrales. La línea de afirmación de terrenos pasa por ahí. El arte africano entrará al Louvre con el cubismo, y esas salas pondrán en tela de juicio a las altas épocas, ordenadas según nuestras evoluciones históricas. El arte africano no tiene historia, y casi no tiene pintura. El arte de las sabanas y de la selva es ajeno a las ciudades, y a las catedrales y a las cavernas. Las artes de las grandes religiones ingresaron al museo por intermedio de Cézanne, y con él las altas épocas de China, de la India, de Tebas, de Babilonia. Por intermedio de Cézanne, también los caldeos monumentales. El poder que anima a todo el arte moderno no resucitó lo anterior, desde el ámbito de las formas.

La pintura moderna ha resucitado todo el poder errante a través de milenios, tan caro a Picasso, pequeño «brujo» de nuestro futuro museo, desde la ritualidad. En donde, por primera vez, el primer Derain, Vlamick, Matisse, Chagal, Modigliani, el arte africano, nuestra edad media y china, hasta el arte de los esquimales y el arte de Oceanía, se nos hicieron presentes.

En San Pablo me impactó el intenso colorido del arte del Ártico. Nuestros artistas occidentales encontraban el mismo lenguaje cristiano en todas las vírgenes negras, y cuando las máscaras-antílopes dogón, fueron expuestas con los fetiches de clavos, los pintores descubrieron una invención inagotable, que llamaron lenguaje de la libertad.

Un pintor dijo: «En el arte africano hay de todo». Y en los talleres de París esto se expresó con la creación de una «tribu» que pasó a nombrar el arte africano: arte yadtú («yadtú» en francés se pronuncia «in y a de tout», que se traduce como: hay de todo, en relación al arte). En Disneylandia no hay nada.

FREDDY SORRIBAS FREDDYSORRIBAS@YAHOO.COMBR