Uruguay realizó la reapertura de sus bonos globales con vencimiento en 2027 y 2050 denominados en dólares

El Ministerio de Economía y Finanzas realizó este jueves la reapertura de bonos globales en dólares con vencimiento en 2027 y 2050.

A través de un comunicado, se informó que los objetivos de las operación son: “Consolidar la política de pre-financiamiento del Gobierno, fortaleciendo el nivel actual de liquidez mediante la obtención de fondos en un contexto de tasas de interés particularmente bajas en términos históricos, y extender la duración del portafolio de deuda”.

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La transacción comprendió la reapertura de los bonos globales denominados en dólares con vencimiento final 2027 y 2050.

El bono 2027 fue emitido en 2015, mientras que el bono 2050 fue emitido por primera vez en 2014.

Según el Ministerio de Economía, el valor de la reapertura total alcanzó los 1.147 millones de dólares, de los cuales unos 400 millones correspondieron a la reapertura del 2027 y el monto restante a la del 2050.

“La demanda superó ampliamente el monto ofrecido, en unas 5 veces. El total de las órdenes del libro excedieron los 5.300 millones de dólares”, indicó el Gobierno

Mientras que el bono con vencimiento a 2027 se reabrió con un rendimiento de 3,52% anual, “el menor costo de financiamiento para una emisión internacional en dólares en la historia reciente de Uruguay”.

El diferencial sobre el bono de referencia del Tesoro de Estados Unidos fue de 205 puntos básicos.

Mientras que el bono con vencimiento en 2050 se reabrió con un rendimiento de 4,93% anual, “el menor rendimiento tras las dos emisiones previas de este bono”.

Economía asegura que el diferencial sobre el bono de referencia del Tesoro de Estados Unidos fue de 275 puntos básicos. Evaluación.

“A pesar del actual contexto de volatilidad global y regional, la emisión recibió una demanda varias veces superior al monto ofertado, y fue sobre-suscripta rápidamente”, informó la secretaría de Estado.

El Ministerio de Economía indica que también sobresale la “alta calidad y diversificación de los inversores participantes”, destacándose la “demanda proveniente de bancos estatales europeos y, por primera vez, instituciones financieras oficiales de Asia”.

Asegura que el momento del lanzamiento de la operación permitió al país “aprovechar el fuerte repunte de precios que han tenido los bonos de la República desde el mes pasado”.

Dicho desempeño se da en el contexto de una “reducción considerable en el rendimiento de los títulos norteamericanos que ofician de referencia, que se ubican actualmente en mínimos históricos”.

Tras la operación, la liquidez del Gobierno “es suficiente para pre-financiar un año y medio de servicio de deuda”. Además, el Gobierno dispone de “líneas de crédito contingente” con organismos multilaterales por 2.417 millones de dólares adicionales.

Como resultado de la reapertura, las reservas internacionales “aumentaron en un monto similar al emitido, apuntalando la fortaleza macroeconómica”.

La nueva operación “confirma una vez más la confianza que los inversores internacionales tienen en la fortaleza de la economía de la República y en la política económica del Gobierno”, aseguró el Ministerio de Economía.

Se trató de la emisión de plazo más largo entre todos los países emergentes en lo que va del año.