Interconexión energética con Brasil operativa en un año, reportará US$ 200 millones anuales

La interconexión energética con Brasil, que estará en funcionamiento desde fines de 2014, tendrá una capacidad de suministro de 500 megavatios y reportará beneficios económicos para Uruguay del orden de los 200 millones de dólares por año.

Desde hace 13 años Uruguay tiene una capacidad de interconexión de 70 megavatios con Brasil.

El presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, aseguró este martes que a fines de 2014 “estará operativo” el sistema de interconexión energética, el cual tendrá una capacidad de suministro de 500 megavatios.

Se trata de una iniciativa en la que Uruguay invirtió 350 millones de dólares y que “garantizará el abastecimiento”.

En estos momentos se está en la fase de “construcción” del tendido de líneas eléctricas desde San Carlos, Maldonado, hasta la convertidora ubicada en Melo y desde esta ciudad hasta Candiota, en el sur de Brasil, donde Uruguay se conectará al sistema eléctrico brasileño de alta tensión.

Casaravilla remarcó que en Brasil la energía “es más barata en invierno que en Uruguay, mientras que en nuestro país es más barata en primavera que en el país norteño”.

“Si recibimos energía de Brasil en invierno, y a su vez se envía a ese país en primavera, se obtienen beneficios económicos del orden de los 200 millones de dólares anuales”, aseguró el jerarca de la empresa estatal.

Desde hace 13 años Uruguay tiene una capacidad de interconexión de 70 megavatios con Brasil. En 2007 ambos países suscribieron un “acuerdo estratégico” en el que Uruguay debía invertir 350 millones de dólares para aumentar la capacidad a 500 megavatios.

“Para ello fue necesario construir una estación convertidora en Cerro Largo”, recordó Casaravilla.

Poner en marcha el sistema de interconexión, lo que ocurrirá a fines de 2014, ayudará a “garantizar el abastecimiento”.

“Si tenemos algún problema en las máquinas térmicas en nuestro país, podemos traer 500 megavatios. También desde el sur de Brasil, que es un subsistema que tiene su propia demanda y generación, ante restricciones de conexión al gran sistema de San Pablo, Uruguay podría suministrar 500 megavatios”, explicó.

El jerarca remarcó que “estar interconectados a los países vecinos permitirá “maximizar el uso de los recursos”.

“Los sistemas eléctricos cuanto más grandes ofrecen más posibilidades de intercambio y más beneficios mutuos”, aseguró Casaravilla según consignó Presidencia de la República.

Según datos aportados por UTE, Uruguay dispone de 3.000 megavatios instalados, Argentina posee 24.000 megavatios, y Brasil tiene 110.000 megavatios.

Un tema de seguridad nacional

Por otro lado, el jerarca de UTE afirmó que la interconexión “permite garantizar el abastecimiento, optimizar las instalaciones de los países y generar beneficios, además de una cultura de cooperación recíproca”.

“La certeza en el abastecimiento es un tema de seguridad nacional y de uso racional de los recursos. Uruguay lo tiene bien claro y es uno de los países más integracionistas de América Latina, ya que siempre ha apostado a la integración energética, un área donde tiene las mejores relaciones con sus vecinos”, afirmó.

En tal sentido, dijo que con respecto a la interconexión con Argentina “nunca se dejó de intercambiar energía eléctrica”.

“Tenemos 2.000 megavatios de conexión a partir de las instalaciones binacionales de Salto Grande”.

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