Planta pasteurizadora de leche caprina del PAGRO pasa de vender 50 litros a 700 litros

El martes 29 a las 18:30 se cumple un año de funcionamiento de la primera Planta Pasteurizadora caprina en el Parque de Actividades Agropecuarias de la calle Hilario Cabrera y Cesar Mayo Gutiérrez. Se trata de un predio de 50 hectáreas en el límite entre Colón y la ciudad de La Paz.

Si bien la iniciativa surgió hace cuatro años, sin embargo el proceso de pasteurización comenzó a realizarse en 2012, a raíz de que el Ministerio de Ganadería no poseía una reglamentación adecuada para procesar el producto.

El proyecto nació como una planta pública con gestión privada, su equipamiento incluye un tanque de frío de 500 litros, una cuba receptora de 120 litros, una pasteurizadora, banco y cámaras de frío y yogurtera, entre otros. La planta de procesamiento permite completar el ciclo productivo.

Demanda insatisfecha

La directora Montevideo Rural de la Intendencia de Montevideo, Ing. Isabel Andreoni, comentó a LARED21 que desde que comenzó a funcionar la planta, hace exactamente un año, “se pasó de vender 50 litros semanales de leche fluida pasteurizada a comercializar más de 700 litros semanales”.

De todas maneras, la empresa pasteuriza más leche, pero su destino es la producción de derivados.

El costo de producción de leche es de entre 7 y 8 pesos, pero en planta se paga entre 18 y 20 pesos al productor.

Andreoni aseguró que el mercado de la leche caprina es “esencialmente interno”, y remarcó que “en la actualidad se está ante una demanda insatisfecha”.

La jerarca municipal se refirió a las características de la leche caprina, un producto de bajo contenido graso, que además es muy similar a la leche materna. Asimismo, es muy buscada por personas que padecen intolerancia a la lactosa.

Por otro lado, Andreoni aseguró que el desafío de la planta es “poder aumentar la cuenca caprina, ya que muchos productores quieren incorporar en sus actividades la cría de cabras”.

El Ministerio de Ganadería autorizó, a comienzo del presente año, la introducción de vientres caprinos. “Ahora estamos terminando un proyecto, para el área metropolitana, para poder introducir vientres y avanzar en esta cuenca.

Remarcó que la cabra se adapta bien a la producción familiar, ya que puede combinarse con otros rubros, es un animal doméstico y puede criarse en un régimen semi-tabulado.

Asimismo, se busca realizar una “diversificación genética, porque Uruguay está entrando en un proceso de endogamia”.

Por otro lado, existe un firme propósito de “integrar algunas razas para producción de carne caprina”. Aunque, ello requiere de una fuerte coordinación con los productores.

En Uruguay hay unas 12 mil cabras.  Entre canelones y Montevideo hay 12 productores con un promedio de 50 cabras. La unidad económica básica es de 40 cabezas, y se estima que por hectárea se pueden criar entre 10 y 12 animales.