Trabajo y Economía definen hoy los cambios en la pauta de ajuste salarial

El subsecretario del Ministerio de Trabajo, Nelson Loustaunau dijo que “posibles” retoques son estudiados en buena parte de los 117 convenios salariales que representan el 51,3% de los acuerdos vigentes. El jerarca agregó que los sindicatos conocen la realidad que vive cada sector, y entendió que desde el gremialismo se está de acuerdo no exigir aumentos en las industrias que han estado recortando sus nóminas de trabajadores, según señaló en declaraciones a radio Carve.

Loustaunau, recordó que el pasado lunes se acordó otro de los convenios que concluyera en diciembre pasado (el de restoranes, bares, hoteles, y pubs), sector que abarca a unos 20.000 trabajadores, y que logra un incremento de salario real para el próximo acuerdo que ronda el 3,5%. Loustaunau no consideró sin embargo que este porcentaje pudiera ser tomado como un piso para todos los sectores.

Poder Ejecutivo: mantener acuerdos con la actual línea

Desde el gobierno se entiende que un aumento salarial moderado será la línea a partir de la cual las negociaciones avancen: el presidente Mujica está particularmente preocupado por los salarios que siguen sumergidos, y se descartó básicamente la idea del Ministerio de Economía para eliminar los correctivos de la inflación pasada.

La pauta de ajuste salarial se comienza a negociar oficialmente en julio próximo y refiere a más de la mitad del total de los convenios colectivos. No obstante las realidades en las finanzas son absolutamente heterogéneas en el conjunto donde están desde las empresas que han batido récords de exportación, a las que se encuentran aún restringidas por medidas proteccionistas de países vecinos.

Asimismo existen algunos sectores muy nutridos, donde los salarios siguen estando sumergidos y las patronales se niegan a mejorar la situación, como el caso de las empleadas domésticas donde unas 120.000 trabajadoras, aspiran llegar a un mínimo que ronde los $10.000 mensuales.