Productores y estados del Cono Sur festejan la suba récord del precio de la soja, que compensa la sequía

Los países del Cono Sur respiran con alivio por el precio récord que alcanzó el lunes la soja, que compensa en parte las pérdidas causadas a las cosechas por la sequía en el verano austral, y da aire a la región frente a la crisis, afirmaron analistas.

«El récord del lunes tiene efecto de compensación por las pérdidas que provocó la sequía, por lo que debió reducirse las estimaciones iniciales de 50 a 40 millones de toneladas. Para Argentina esta subida de la soja implica un ingreso adicional fiscal de 3.000 millones de pesos (660 millones de dólares)», dijo a la AFP Guillermo Rossi, analista de la Bolsa de Comercio de la ciudad de Rosario, el mayor puerto de exportación de granos de Argentina.

La soja alcanzó el lunes el precio récord de 612,9 dólares la tonelada en el mercado de referencia de Chicago, y acumula un incremento del 30% en el transcurso del año, frente a la anterior marca histórica de 609 dólares la tonelada registrada el 3 de julio de 2008.

El aumento se produce cuando las economías de la región acusan el impacto de la crisis financiera en Europa.

Las exportaciones del complejo sojero (poroto, aceite y harina) de Argentina suman unos 20.000 millones de dólares, casi una cuarta parte del total de 84.269 millones de dólares de sus ventas al exterior en 2011, de acuerdo con cifras oficiales.

Muchos agricultores de Argentina, el tercer exportador mundial del grano detrás de Estados Unidos y Brasil, han acopiado parte de su producción como respuesta negativa al pedido del gobierno para liquidar rápido sus ventas, ante la necesidad oficial de atesorar dólares para hacer frente a obligaciones externas.

«Muchos productores liquidaron sus dólares por las exportaciones de soja cuando la tonelada estaba a 450 dólares. Otros decidieron acopiar el producto y ahora la tonelada está a más de 600 dólares, pero sigue la incertidumbre por la cuestión cambiaria» tras las medidas adoptadas por el gobierno argentino, dijo a la AFP Mauricio Claverí, analista de Comercio Exterior de la consultora Abeceb.com.

En Brasil, segundo exportador mundial de soja, con la cosecha de 2011-12 prácticamente terminada, el volumen hasta el momento es de 66,3 millones de toneladas, casi nueve millones menos que la del año anterior, debido al fenómeno climático de La Niña, según datos del Ministerio de Agricultura.

Por los altos precios, se repitió el fenómeno de ventas anticipadas que se produjo en Argentina.

«Hubo una anticipación de los embarques de soja en el primer semestre del año, ante el elevado precio. Brasil ya exportó 23,4 de los 30 millones de toneladas que se estima exportaría en el año entero», señaló a la AFP el director de la Asociación de Comercio Exterior de Brasil, José Augusto de Castro.

Las exportaciones brasileñas de soja en grano en el primer semestre de este año sumaron 11.937 millones de dólares, contra 8.809 millones en el mismo período de un año antes (+34,4%).

En la zafra que viene, 2012-2013, Brasil tendrá una producción estimada de 78 millones de toneladas y Argentina de 55 millones, dijo Rossi al citar estimaciones en aumento de la secretaría de Agricultura de Estados Unidos, tras una zafra anterior muy débil.

En Uruguay en tanto, «es muy factible que en las condiciones actuales» se «retome la senda de crecimiento del cultivo y se acerque al millón de héctareas», desde las 850 a 860.000 héctareas de los años anteriores, dijo a su vez a la AFP en Montevideo el analista Rafael Tardáguila, explicando las consecuencias del aumento de precios para un producto que encabeza las exportaciones uruguayas desde hace poco tiempo.

El analista recordó que la soja había sido en la siembra 2010 el 88% del área de cultivo y que en 2011 había bajado a 78%, pero estimó que este año podría superar el 80%.

En Paraguay la fuerte incidencia de la soja en la economía podría impactar en un crecimiento del Producto Interno Bruto de hasta los dos dígitos, indicó a la AFP el presidente de la Unión de Gremios de la Producción, Héctor Cristaldo.

«Estimamos que nuestra producción este año será de tres millones de hectáreas sembradas y entre ocho y nueve millones de toneladas, el doble o más de lo producido en la cosecha anterior» cuando hubo sequía, dijo Cristaldo.

¿Se mantendrán altos los precios?

Algunos expertos consideran que la bonanza, luego de que la soja alcanzó el lunes el récord de 612,29 dólares la tonelada, cederá cuando acabe la sequía en Estados Unidos, mientras otros consideran que el valor de la oleaginosa seguirá alto por la creciente demanda de China, principal consumidor mundial.

«Me cuesta creer que en las condiciones actuales del mundo el precio siga creciendo de forma exorbitante, dentro de poco seguramente va a encontrar un techo y va a dejar de crecer. Si se pone a llover en Estados Unidos va a haber un corrección importante a la baja en las cotizaciones, en la medida que no llueva se va a mantener en estos niveles tan altos», dijo Tardáguila.

En cambio, Claverí estimó que «en lo que resta del año los precios seguirán altos, impulsados por la baja en la producción de Estados Unidos y por la fuerte demanda de China y de otros países asiáticos»