Bolsas eufóricas

Victoria española: la eurozona aprobó la recapitalización directa de su banca, a cambio de un férreo control financiero

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy

«Fue una cumbre muy difícil, muy dura (…) pero hemos obtenido» resultados, señaló el viernes el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, tras un maratón de dos días de reuniones de dirigentes europeos. «Hemos tomado decisiones inimaginables hace un mes», dijo a su vez el presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Barroso.

Las bolsas europeas celebraron eufóricas el acuerdo con fuertes alzas; y en los mercados de deuda, las tasas de interés de la deuda de España –que llegaron a superar el 7%– e Italia a diez años cayeron respectivamente por debajo de 6,5% y de 6%, revirtiendo la insostenible tendencia al alza de los últimos días.

La bolsa de Milán terminó con un alza de 6,59%, mientras que Madrid subió 5,66%, igual que París (+4,75%), Fráncfort (+4,33%) y Londres, con un alza más moderada de 1,42%. La bolsa de Atenas avanzó 5,68%.

En América, la Bolsa de Nueva York registró un alza de 2,20% en el Dow Jones, su principal indicador. La plaza bursátil de Sao Paulo trepó 3,23%, la Bolsa de México ganó 1,42%, la plaza de Santiago 1,47% y el Merval en Argentina 3,46%.

La canciller alemana, Angela Merkel, aseguró que permaneció «fiel» a sus principios al pedir contrapartidas a cambio de ceder en medidas clave para ayudar a España e Italia, muy castigadas en los últimos meses en los mercados, donde han pagado tasas desorbitantes para financiarse.

El Parlamento alemán aprobó la noche del viernes el pacto fiscal europeo y el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), dándole una amplia mayoría a la canciller, para quien este voto «muestra al mundo» que Alemania se compromete con la moneda única.

La inyección de capital directa a la banca española, con un tope de 100.000 millones de euros, se hará desde el fondo de rescate europeo, sin pasar por el Estado, pero a condición de que «el BCE pase a ser el supervisor único del sector bancario en la eurozona», como quería Alemania.

Una vez que esta supervisión reforzada entre en vigor, posiblemente antes de fin de año según estimó la UE, la ayuda dejará de contabilizar como deuda pública.

Esto es una gran noticia para España, país que se ha comprometido con Bruselas a reducir su déficit público al 5,3% del PIB este año, frente al 8,9% en 2011, en medio de una grave recesión y un desempleo que afecta casi al 25% de la población.

España deberá además cumplir con «una condicionalidad adecuada», según señaló el Eurogrupo, que no dio más detalles sobre el rescate bancario cuyas condiciones (monto exacto, plazos de devolución, períodos de carencia, tasas de interés) espera tener definidas en la próxima cumbre del 9 de julio.

España pidió oficialmente esta semana ayuda a la zona euro para sanear e inyectar capital en su banca, fragilizada tras el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008.

El rescate de España se hará primero a través del fondo de rescate temporal FEEF y después el MEDE, que entrará en vigor en julio, y que en este caso no tendrá su condición de acreedor preferente, muy buena noticia para los inversores privados, que temían quedar relegados en caso de que el país declarara una moratoria.

Italia y España hicieron el jueves un frente común para supeditar su aval al pacto de crecimiento de la Unión Europea (UE) por 120.000 millones de euros a la aprobación de medidas urgentes para salir de la crisis de la deuda.

Monti también se salió con la suya. El Eurogrupo dijo estar «abierto» a que los países que cumplen las reformas impuestas por Bruselas puedan recurrir a los fondos de rescate europeos para «calmar los mercados». Esto implica que el fondo de rescate de la UE tendrá más flexibilidad para comprar deuda de España o Italia en los mercados secundarios.

En los últimos días, Merkel dio a entender que podría ceder en algunas medidas, pero sólo si obtenía a cambio el compromiso de una profunda integración y disciplina fiscal.

Justamente, el proyecto contempla la figura de un superministro de Finanzas europeo con capacidad para intervenir en los presupuestos de cada país e incluso modificarlos.

La Casa Blanca consideró «alentadoras» las decisiones de la eurozona en Bruselas.

«Es alentador que los líderes busquen formas de reducir las preocupaciones inmediatas de los mercados y que aborden reformas de largo plazo y planes de integración», dijo el portavoz del presidente Barack Obama, Jay Carney, a bordo del avión presidencial Air Force One.

También los ministros de Finanzas del G20 manifestaron este viernes su «completo» apoyo a las medidas acordadas en la Cumbre Europea en un comunicado difundido desde México, país que ostenta la presidencia temporal del grupo de economías desarrolladas y emergentes.

Los analistas de ODDO Securities no son sin embargo demasiados optimistas. Para ellos esta cumbre dejó claro «la profunda línea divisoria» entre el grupo de países acreedores (Alemania, Holanda, Finlandia) y el de deudores (España e Italia).

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje