Tribunal británico dictamina que el veganismo debe estar protegido por la ley

Un tribunal del Reino Unido calificó como creencia filosófica amparada por la ley al veganismo.

El activista británico de origen catalán, Jordi Casamitjana, había presentado la demanda en un tribunal laboral después de haber sido despedido por una empresa por su filosofía vegana.

Los veganos comen una dieta basada enteramente en plantas y rechazan el uso de cualquier producto que contenga ingredientes de origen animal. Aparte de la comida, tampoco utilizan cosas como productos de pieles animales y proteínas o suplementos de origen animal, entre otros.

Una religión, creencia o filosofía es una de las nueve «características protegidas» cubiertas por la Ley de Igualdad aprobada en el Reino Unido en 2010. El juez Robin Postle dictaminó que el veganismo por razones éticas es una creencia filosófica ya que cumple con los criterios establecidos por la Ley de Igualdad: es digno de respeto en una sociedad democrática, no es incompatible con la dignidad humana y no entra en conflicto con los derechos fundamentales de los demás.

Victoria para el veganismo ético

Para Peter Daly, abogado de Casamitjana, los impactos de este fallo a mediano y largo plazo son «potencialmente significativos». Para él, cualquier abuso dirigido a veganos éticos «podría verse como acoso de la misma manera que un insulto racista o sexista podría ser una acción discriminatoria«.

Aunque la sentencia de un tribunal laboral no equivale a un precedente legal enteramente vinculante, la decisión tendrá efectos importantes: los empleadores deberán respetar al veganismo ético y asegurarse de no discriminar a quienes lo practiquen.

También tendría impactos en otros ámbitos de la vida de los ciudadanos, por ejemplo en áreas como la educación, el suministro de bienes y servicios y en la atención médica. Los veganos podrán pedir así que se respete su creencia filosófica y esto se les deberá garantizar.

Ley de Igualdad de 2010

La Ley de Igualdad, aprobada en 2010 en el Reino Unido, contempla nueve «características protegidas» que son inviolables. Además de las creencias religiosas, la sociedad debe respetar: la edad, las capacidades físicas distintas, el cambio de sexo, el matrimonio o pareja civil, embarazo o maternidad, origen étnico, sexo y orientación sexual.

Si una creencia cumple los criterios, es ilegal discriminar a alguien por tener esa creencia. Para ser protegida, una creencia filosófica debe cumplir los siguientes criterios:

• Debe ser genuinamente mantenida, aunque no tiene que ser necesariamente compartida por otros.
• Debe ser una creencia, no simplemente una opinión o punto de vista basado en el estado de información disponible en el momento.
• Debe referirse a un aspecto significante y sustancial de la vida y conducta humanas.
• Debe alcanzar un cierto nivel de evidencia, gravedad, cohesión e importancia.
• Debe ser digna de respeto en una sociedad democrática, no debe ser incompatible con la dignidad humana y no puede entrar en conflicto con los derechos fundamentales de otros.
• Debe tener un estatus similar al de una creencia religiosa, pero no necesita basarse en un sistema de pensamiento completamente desarrollado.