Los mastodontes se extinguieron mucho antes que los humanos llegaran a conocerlos
La aceptada imagen de nuestros prehistóricos antecesores intentando cazar o simplemente conviviendo entre los mastodontes es un mito, afirman los últimos estudios paleontológicos en la materia.
Los especialistas del Yukon Paleontology Program, han confirmado que estos gigantescos mamíferos tuvieron en realidad una muy corta permanencia en la faz de la Tierra, extinguiéndose mucho antes que los humanos llegaran a los lugares donde habitaron.
La tradición pictórica muestra a los mastodontes en las tundras heladas y en el Ártico, cerca de los humanos que hace unos 14.000 años deambulaban por la región; la realidad muestra que los mastodontes ya habían desaparecido.
“La presencia de mastodontes en el norte del planeta no duró demasiado tiempo. El retorno del frío, las condiciones glaciales secas y el avance de los glaciares continentales unos 75.000 años atrás destruyeron efectivamente sus hábitats”, explicó Grant Zazula, paleontólogo del programa que estudia sus fósiles. La idea que la caza fue la razón de la extinción de los mastodontes es simplemente una fábula.
Los mastodontes vivieron hace 125.000 años en otro clima
Uno de los misterios ahora develados –como los mastodontes lograban sobrevivir sin el largo pelo de los mamuts- queda aclarado en tanto los mastodontes vivieron hace 125.000 años, cuando el clima en las altas latitudes era mucho más benigno, e incluso había bosques y humedales con temperaturas altas. También explica como los mastodontes podían alimentarse con hojas, algo que no había tenido respuesta hasta ahora.
Las dificultades para determinar las nuevas certezas están en la escasa cantidad de fósiles de mastodontes conocidos: apenas unas tres decenas de huesos y dientes en distintos museos del mundo.
Algunos de los huesos fueron ahora datados con pruebas de carbono 14 e hicieron retroceder la data de los mastodontes incluso hasta 50.000 años atrás, en el llamado Pleistoceno tardío. Vivieron en un área que abarcó Norteamérica y llegó hasta América Central, y tampoco tuvieron contacto con los humanos que vendrían desde la actual Asia, cruzando el Estrecho de Bering, mucho después que los mastodontes desaparecieron, sin que se sepa ahora con certeza cual puede haber sido la causa de su extinción.
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