SECRETO EN LA FURIA ROJA

España se prepara en el máximo secreto para afrontar mañana en Pretoria «una final» del Grupo H ante una exitosa Chile, de la que depende su billete para los octavos de final. Es «un partido en el que no hay nada resuelto, todo el mundo se va a jugar la clasificación y favorito no hay nadie, todo el mundo llega al 50%», afirmó este miércoles el defensa español, Carlos Marchena, durante una rueda de prensa en Potchefstroom, donde tiene su base la «Furia Roja». Y por ello, España, a la que su derrota ante Suiza 1-0 en su estreno mundialista trastocó sus planes, prefiere no desvelar sus cartas más de lo necesario y tendrá un entrenamiento a puerta cerrada en la tarde de ayer. El seleccionador español, Vicente del Bosque, programó por la mañana una sesión de gimnasio voluntaria, a la que seguirá por la tarde un entrenamiento en el campo fuera de focos, para evitar dar pistas sobre lo que presentará el viernes ante la Roja sudamericana en un partido trascendental. La victoria es vital para ambos equipos, ya que les permitiría asegurarse su pase a los octavos de final, mientras que cualquier otro resultado supondría depender de lo que hagan también Honduras y Suiza en el otro choque del apretado grupo H.