España: tres al hilo, como la Celeste uruguaya en los años ’20

La selección española hizo historia encadenando los títulos Eurocopa-Mundial-Eurocopa, los tres últimos grandes torneos en los que ha participado, siguiendo los pasos del Uruguay de los años veinte, que encadenó las Copas América de 1923 y 1924 con el oro olímpico de París-1924.

El Mundial se creó en 1930, con lo que los Juegos Olímpicos eran considerados como la gran cita planetaria hasta entonces.

En el fútbol europeo, el éxito de España no ha sido conseguido por nadie y es una hazaña inédita. La Roja se convierte además en el primer equipo en revalidar su título en la Eurocopa, ya que ninguno hasta ahora había logrado levantar el trofeo en dos ediciones consecutivas.

El Uruguay de 1923 y 1924 reinaba al conseguir dos títulos seguidos en el campeonato Sudamericano, la actual Copa América, en ambos casos como local.

En el primer caso, la organización estaba inicialmente confiada a Paraguay, pero finalmente el equipo guaraní renunció por problemas de infraestructuras y el torneo tuvo lugar en el estadio Gran Parque Central de Montevideo.

La Celeste ganó los tres partidos disputados, contra Paraguay (2-0), Brasil (2-1) y Argentina (2-0), en el grupo único del torneo, y acabó como vencedor, con uno de sus hombres, Pedro Petrone, como máximo goleador de la competición con tres dianas, igualado con el argentino Vicente Aguirre.

Poco más de medio año más tarde, Uruguay se coronó en los Juegos Olímpicos consiguiendo una victoria en París-1924, en el estadio de Colombes, goleando 3-0 a Suiza en la final, con tantos de Petrone, Pedro Cea y Ángel Romano.

El equipo sudamericano había comenzando ganando 7-0 a Yugoslavia en la primera ronda y luego continuó superando a Estados Unidos (3-0) en la segunda y a los locales franceses (5-1) en la tercera. En semifinales, derrotó 2-1 a Holanda, con goles de Cea y un penal transformado por Héctor Scarone.

Apenas tres meses después, Uruguay volvía a jugar como local el campeonato Sudamericano y no decepcionó, llevándose de nuevo el título en el grupo único de cuatro equipos, esta vez con dos triunfos, sobre Chile (5-0), Paraguay (3-1) y Argentina (0-0).

Petrone fue de nuevo el máximo anotador del torneo, esta vez en solitario y con cuatro tantos.

En 1925, Uruguay tenía la oportunidad de sumar un nuevo Sudamericano, en Argentina, pero renunció antes del torneo por motivos internos y la albiceleste conquistó el título en casa. La charrúa volvió a participar y ganar en 1926, pero su racha ya había quedado cortada un año antes.