A 162 AÑOS

José Martí: «Versos nacidos de grandes miedos o de grandes esperanzas»

Se cumplen 162 años del natalicio del gran escritor y político cubano José Martí. Cuba lo celebra con la tradicional Marcha de las Antorchas en La Habana, acontecida en la noche del martes, en la víspera de su aniversario.

“Los árboles se han de poner en fila, para que no pase el gigante de las siete leguas», dice en Nuestra América.

Se trata de un héroe nacional para los cubanos, que lo homenajean mediante una gran marcha de antorchas. Pero también es un símbolo de la lucha y la resistencia latinoamericanas.

Yusuam Palacios Ortega, el presidente del Movimiento Juvenil Martiano (MJM), señaló que “en todas partes los “pinos nuevos” alzarán la llama de la libertad, como ofrenda de amor al Maestro y celebración del regreso a casa —tras largos años de incesante batallar contra la injusticia— de los Cinco Héroes prisioneros del Imperio”.

En La Habana “la entusiasta multitud andará de la Colina Universitaria a la Fragua Martiana, en esta ocasión con 10 antorchas gigantes empuñadas por atletas destacados como avanzada”, agregó a la prensa cubana.

Se le rendirán hoy otros múltiples homenajes en Cuba y otros países de Latinoamérica, cursos, concursos, seminarios, encuentros, visitas a museos, entre otros.

Martí

Nacido en La Habana un día como hoy pero hacia 1853 y fallecido en 1895. Escritor y político, al que se le debe buena parte del modernismo literario en Hispanoamérica, siendo además, uno de los líderes de la independencia. Cuando estudiaba en el colegio municipal, el poeta Rafael María de Mendive, que dirigía la institución, decidió dedicarse de manera personal a su educación.

Prontamente Martí se involucró con ideas revolucionarias que impregnaban el ambiente cubano, y cuando inicia la Guerra de los Diez Años su mentor es encarcelado, lo que lleva al joven escritor a incorporarse de lleno a la actividad revolucionaria. Con solo 16 años fue condenado a seis años de prisión, aunque su frágil estado de salud le valió la salida de la cárcel antes de que cumpliese la pena. Fue deportado a España, en donde se licenció en derecho y filosofía y letras.

Luego de viajar durante tres años por Europa y América, José Martí se instala México. Al concluir la guerra de los diez años se trasladó a Cuba pero fue deportado tras un breve período nuevamente por las autoridades, y tuvo que viajar a Nueva York, en donde se dedicó a su actividad como escritor y también político.

En 1892 fundó el Partido Revolucionario Cubano y la revista Patria. Convirtiéndose en uno de los máximos exponentes de la lucha por la independencia de su país.

Fue abatido por las tropas realistas a los cuarenta y dos años.

La poesía de José Martí

La poesía de Martí lo vuelve un referente en la transición al modernismo. Entre sus obras más destacadas se encuentran Versos libres (1878-1882); Ismaelillo (1882), y Versos sencillos (1891), un poemario modernista donde campean apuntes autobiográficos y un carácter popular.
Los versos libres fueron calificados por el poeta como «endecasílabos hirsutos, nacidos de grandes miedos, o de grandes esperanzas, o de indómito amor de libertad, o de amor doloroso a la hermosura».

Su única novela se llamó Amistad funesta, también denominada «Lucía Jérez» y firmada con el pseudónimo de Adelaida Ral, se publicó por entregas en el diario El Latino-Americano en 1885.

Entre sus dramas se destacan Abdala (1869), La Adúltera (1873) y Amor con amor se paga (1875).
Escribió numerosos ensayos, entre ellos acerca de Bolívar, San Martín, Emerson y Walt Whitman.

Sin duda su ensayo más importante es «Nuestra América», publicado en 1891, que influyó de manera determinante en las luchas de independencia, en la lucha antiimperialista y en el pensamiento acerca de Latinoamérica como una gran patria.“Los árboles se han de poner en fila, para que no pase el gigante de las siete leguas. Es la hora del recuento, y de la marcha unida, y hemos de andar en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes», dice Martí.

La obra de Martí es inseparable de su ética y su lucha política.

El profesor Horacio Díaz Pendás, sostiene que “todo lo que dijo, y escribió Martí en el mejor español lo suscribió con la ejemplaridad de su vida: hay una coherencia extraordinaria entre el lenguaje que emplea en sus discursos y artículos y el imponente y educador lenguaje de sus actos; esa interrelación entre pensamiento y acción en José Martí es impresionante y nos legó la mejor de las lecciones que fue su propia existencia”.

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