ANIMALES SILVESTRES

Flores: Denuncian mal estado de guacamayos colorados en reserva Tálice

“Siguen muriendo animales fruto de tuberculosis” en los zoológicos que adoptan nombres engañosos como “ecoparque”, denuncia un ambientalista sobre los guacamayos que están en una reserva del departamento de Flores.

Uno de los guacamayos en poder del ecoparque Talice. Foto: COENDU
Uno de los guacamayos en poder del ecoparque Tálice. Foto: COENDU

La condición en la que se encuentran los guacamayos colorados en la reserva Talice, ubicada en la ciudad de Trinidad, Flores, ha generado cruces entre ambientalista y la Intendencia Departamental.

Mauricio Álvarez, presidente de la organización Conservación de Especies Nativas del Uruguay (COENDU), se sumó a una denuncia pública por supuestos malos manejos de estos animales que se encuentra, según dicen, en un «deplorable estado».

“Siguen muriendo animales fruto de tuberculosis” en los zoológicos que adoptan nombres engañosos como “ecoparque”, sostuvo.

En su entrevista con Radio Uruguay, Álvarez dijo que Uruguay fue partícipe junto con la organización The Conservation Land Trust para la reintoducción a su entorno natural de guacamayos colorados, muchos de los cuales fueron incautados a tenedores que los mantenían en cautiverio.

«Estábamos muy contentos con esto, esperando cada vez más respuesta de los tenedores (…) y de zoológicos, ecoparques y demás, pero no ha sido así», explicó Álvarez, quien confirmó que solamente tienen dos guacamayos para ser preparados para regresar a su entorno natural.

Según él, quien desee puede denunciar a la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA) si conoce de un caso de alguien que tenga un animal de estos de forma ilegal, o bien, su tenedor lo puede entregar de forma voluntaria, también comunicándose al mismo organismo.

 

Denuncia contra el Tálice

La reserva de Flora y Fauna Dr. Rodolfo Tálice tiene en su poder más de 1.500 animales de 120 especies en un total de 75 hectáreas y se hacen llamar «ecoparque».

«Sabíamos que ellos tienen guacamayos, les enviamos una nota en julio del año pasado, la misma que enviamos al departamento de Turismo de la Intendencia de Flores -el cual nos respondió que había reenviado la nota al ecoparque-. Después de un mes no tuvimos noticias y llegamos a tener un diálogo con el intendente via Twitter, donde nos prometió una reunión que sería para después de la inauguración del ecoparque, que en un principio era el 1° de setiembre (de 2018), y luego de eso nunca más nos respondió», aseguró Álvarez.

Dijo que, a pesar de que le escribieron en distintas ocasiones después de ese intercambio de tuits, no volvieron a recibir contestación del intendente, Fernando Echeverría.

Una socia de la ONG visitó el ecoparque y encontró que tienen cinco guacamayos de los cuales, al menos uno de ellos, se encuentra en «deplorable estado de salud», denunció.

Por medio de su página de Facebook, COENDU presentó imágenes de uno de los ejemplares que aparece casi sin plumas y con un mal semblante.

Los animales, dice COENDU, están conviviendo en jaulas muy pequeñas, a pesar de que cuando están en libertad suelen volar varias decenas de kilómetros al día; de hecho, en estas jaulas ni siquiera pueden volar. 

El peor de los casos es el de uno de los ejemplares que comparte jaula con monos aulladores, también encerrados en jaulas excesivamente pequeñas.

Por su parte, el gobierno del intendente Echeverría se defiende diciendo que ellos «siguen» las indicaciones de los técnicos contratados para el ecoparque, que son «los que saben», a pesar de que los voluntarios de COENDU constataron el estado de salud de los animales. También recordó el caso de un guacamayo que llegó al departamento hace 8 o 9 años a través de una donación de Laetitia D’Aremberg. “Llegó con un faltante importante de plumas. Ella había mandado analizar los motivos por los que no recuperaba dicho plumaje. Había perdido los folículos plumosos y ya no iba a tener plumas de colores. Eso no quiere decir que el animal esté en malas condiciones”, dijo el intendente.

Lo que pide Álvarez y su organización es que los animales les sean entregados para hacerlos llegar al Proyecto Iberá, de Argentina, que se encarga de rehabilitar estos animales a su estado natural para poder reintegrarlos a la naturaleza.

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