Una extensa caravana acompañó los restos de Jorge Batlle hasta el cementerio Central. Lo despidieron figuras políticas de todos los partidos

 

El vicepresidente de la República, Raúl Sendic, junto a la familia de Batlle y su esposa Mercedes Menafra y el senador colorado Pedro Bordaberry aguardaron la llegada del féretro en las escalinatas del Palacio Legislativo.

Los restos mortales de Jorge Batlle fueron velados en el Salón de los Pasos Perdidos, adonde concurrieron figuras de todos los partidos políticos y cientos de ciudadanos.

El presidente Vázquez fue el encargado de pronunciar una palabras en homenaje a la figura de Batlle.

“El doctor Jorge Batlle ha sido un político importantísimo e influyente en la historia de nuestro país y marcó todo una época”, expresó Vázquez.

También indicó que se trató de un hombre “liberal convencido de sus ideas y que las puso en práctica”.

“Fue un provocador del pensamiento y más allá de los acuerdos o discrepancias que con él se pudiera tener, pautaba y marcaba instancias muy definidas en cada una de sus expresiones”, remarcó.

El jefe de Estado manifestó que Batlle fue un “político de élite, de estirpe, de fuste y así honró y vivió su vida hasta el último día”.

“Tenemos que despedir a una de las personas más inteligentes que he conocido en mi vida y lo hacemos con enorme respeto y con un sentimiento de dolor real que parte de lo más profundo de nuestro ser”, aseguró el mandatario.

“Mercedes Menafra y toda la familia de Jorge Batlle: tengan la certeza de que él vivió como quiso vivir, fiel a su convicción y pensamiento. Como lo ha dicho el poeta: ‘Vivir se debe la vida de tal suerte que viva quede en la muerte’. Sin dudas Jorge Batlle quedará grabado no solo en los muros de este Palacio, sino en la mejor historia de nuestro país. Hasta siempre Jorge Batlle”, puntualizó Vázquez.

Expresidentes

Los expresidentes de la República, Luis Alberto Lacalle, y José Mujica también concurrieron al velatorio y se refirieron a la figura de Batlle. El ex mandatario Julio María Sanguinetti no concurrió por no encontrarse en el país, también se refirió a la personalidad de su correligionario.

Mujica dijo: “Estamos despidiendo a un luchador con quien tuvimos muchos desacuerdos. La política como Batlle, es una pasión que se abandona el día en que nos vamos en el féretro”.

“Yo no voy a ser candidato a la Presidencia, pero nunca voy a ser apolítico o neutral porque a eso no se puede renunciar y a Batlle le pasaba lo mismo. Dentro de la amargura de una despedida, hasta su retirada simboliza lo que fue el transcurso de su vida”, aseguró Mujica.

El también ex presidente del Partido Nacional, Luis Alberto Lacalle, dijo que Batlle estuvo sano, capaz e inteligente hasta el último día de su vida.

El expresidente Lacalle recordó a Jorge Batlle en su “fervor político” y señaló que a él también le gustaría “morir en la tribuna” defendiendo a su partido”.

Resaltó su sentido del Estado, de la patria y la autoridad. “No se dejó amedrentar en el 2002 en medio de la crisis y el país salió adelante. Salvar una crisis es una obra importante”.

“Un hombre de una gran cultura e información, que hablaba muchos idiomas y con una memoria peligrosa” resaltó.

Entretanto Julio María Sanguinetti dijo, en declaraciones a canal 12, que si bien “Jorge fue el cuarto de los Batlle que llegó a la Presidencia, él fue dueño de sí mismo, tuvo su estilo, su personalidad y sostenía sus ideas novedosas y polémicas con tenacidad y convicción”.

“Vivía siempre en el futuro, tratando de encontrar un nuevo camino, esa es la mayor definición de su actitud intelectual, su enorme capacidad de servicio, su sentido de la República y su sentido consustancial del deber y la responsabilidad”, dijo Sanguinetti.

“En lo personal, hemos estado más de 60 años en esta batalla, es parte de la propia vida que queda en la historia”, remarcó.

Luego del velatorio,  una extensa caravana acompañó el cortejo fúnebre desde el Parlamento, hasta el cementerio Central y en su paso por la Casa del Partido Colorado, en la calle Andrés Martínez Trueba.

El ex vicepresidente de la República, Luis Hierro López fue el encargado de pronunciar unas palabras de despedida. “Vivió y murió a su medida. Vivió luchando por su partido y la libertad y murió luchando por su partido y su libertad”.

“Era un hombre de un enorme coraje intelectual, porque solamente un hombre de un enorme coraje intelectual pudo haber planteado en su propio partido ideas que iban en contra de la corriente”, remarcó.

“Nunca pensamos que Jorge Batlle podía morirse, teníamos la impresión de que era inmortal. ¿Quién le va a hablar al porvenir de los uruguayos ahora que Jorge no está?”, sentenció Hierro López.